La agencia calificadora Fitch confirmó la calificación de riesgo crediticio y de deuda de Petróleos Mexicanos (Pemex) de BBB+ en moneda extranjera y local y modificó su perspectiva de negativa a estable. Lo anterior, en línea con el cambio en la perspectiva de México de negativa a estable para la calificación de la deuda soberana.
Esta es la segunda mejora en el panorama crediticio de la empresa en menos de un mes, después de que la calificadora Standard and Poor’s hiciera lo mismo el pasado 19 de julio.
Un mejor panorama de la calificación crediticia genera mayor certidumbre en el cumplimiento de los compromisos financieros de la empresa, así como mayor confianza tanto en los proyectos actuales como en los potenciales que incluyan algún socio.
Esta acción es uno de los resultados del compromiso y los esfuerzos de la empresa por fortalecer su estructura financiera:
I. La puesta en marcha de su Plan de Negocios 2017-2021, apegado a la disciplina financiera, la aplicación de un amplio programa de austeridad y la canalización de inversiones a los proyectos más rentables.
II. La materialización de la Reforma Energética a través de asociaciones y alianzas estratégicas en la exploración, producción y refinación del crudo.
III. El fortalecimiento de su perfil de deuda, con mayor diversificación de fuentes y mayores plazos.
Adicionalmente, Fitch informó que la economía mexicana ha demostrado resistencia ante los precios internacionales más bajos del petróleo, remarcando la disminución de los riesgos probables ante la renegociación del TLCAN, además de que el gobierno ha mostrado capacidad para enfrentar estos desafíos. México continúa avanzando con la consolidación fiscal y Fitch prevé que ello, junto con la apreciación reciente del peso mexicano, generará en adelante una tendencia renovada a la baja en la carga de deuda pública.
La agencia calificadora Fitch confirmó la calificación de riesgo crediticio y de deuda de Petróleos Mexicanos (Pemex) de BBB+ en moneda extranjera y local y modificó su perspectiva de negativa a estable. Lo anterior, en línea con el cambio en la perspectiva de México de negativa a estable para la calificación de la deuda soberana.
Esta es la segunda mejora en el panorama crediticio de la empresa en menos de un mes, después de que la calificadora Standard and Poor’s hiciera lo mismo el pasado 19 de julio.
Un mejor panorama de la calificación crediticia genera mayor certidumbre en el cumplimiento de los compromisos financieros de la empresa, así como mayor confianza tanto en los proyectos actuales como en los potenciales que incluyan algún socio.
Esta acción es uno de los resultados del compromiso y los esfuerzos de la empresa por fortalecer su estructura financiera:
I. La puesta en marcha de su Plan de Negocios 2017-2021, apegado a la disciplina financiera, la aplicación de un amplio programa de austeridad y la canalización de inversiones a los proyectos más rentables.
II. La materialización de la Reforma Energética a través de asociaciones y alianzas estratégicas en la exploración, producción y refinación del crudo.
III. El fortalecimiento de su perfil de deuda, con mayor diversificación de fuentes y mayores plazos.
Adicionalmente, Fitch informó que la economía mexicana ha demostrado resistencia ante los precios internacionales más bajos del petróleo, remarcando la disminución de los riesgos probables ante la renegociación del TLCAN, además de que el gobierno ha mostrado capacidad para enfrentar estos desafíos. México continúa avanzando con la consolidación fiscal y Fitch prevé que ello, junto con la apreciación reciente del peso mexicano, generará en adelante una tendencia renovada a la baja en la carga de deuda pública.