Pemex anunció la desinversión del 50% de su participación social en la empresa Ductos y Energéticos del Norte, dicha participación implica el 25 por ciento en el Gasoducto de Ramones II Norte.
La reforma energética abre la oportunidad a los distintos participantes nacionales e internacionales para invertir en proyectos del sector energético nacional, tal es el caso del transporte de gas natural, lo que permitirá cubrir la creciente demanda por este tipo de energías. Para Pemex esta actividad deja de ser estratégica y le posibilita dedicar recursos a los negocios prioritarios.
El monto de la operación asciende a aproximadamente 231 millones de dólares, el cual se encuentra dentro de los rangos de valuación de empresas comparables y transacciones precedentes en el sector de transporte y almacenamiento de hidrocarburos. Es importante mencionar que este monto será ajustado en la fecha de cierre, reconociendo los derechos y obligaciones de cada socio en ese momento, lo que es común en este tipo de transacciones.
Los recursos provenientes de la desinversión contribuirán a mejorar el perfil financiero de la empresa, disminuyendo las necesidades de financiamiento en los mercados de deuda.
Esta transacción está sujeta a que se obtenga la autorización regulatoria de la Comisión Federal de Competencia Económica (COFECE).
Con este tipo de acciones, Pemex reitera su compromiso por consolidar sus finanzas a través del enfoque en actividades estratégicas, en el nuevo contexto de la industria energética nacional.