El día de hoy, el Diario Oficial de la Federación (DOF) publica el acuerdo aprobado por el Órgano de Gobierno de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) el pasado 27 de octubre sobre los aspectos generales del abasto aislado. Este nuevo instrumento regulatorio dará certeza a los permisionarios en la modalidad de generación de energía eléctrica.
Con base en la Ley de la Industria Eléctrica (LIE), la CRE ha otorgado 45 permisos de generación eléctrica con actividades de abasto aislado, que en su conjunto suman una capacidad autorizada de 638 MW. Estos proyectos representan una inversión aproximada de 1,400 millones de dólares, monto equivalente al 22 por ciento de la inversión de los proyectos adjudicados en las dos primeras Subastas de Largo Plazo.
Cabe mencionar que, previo a la emisión de esta nueva regulación, no existía certeza sobre los distintos modelos de negocio ni sobre las reglas aplicables a esta figura de generación y consumo en sitio que cuenten con sistemas de generación con capacidad mayor a 500kW, tanto por parte de desarrolladores de proyectos, como por usuarios interesados en reducir su consumo de energía eléctrica proveniente del Sistema Eléctrico Nacional (SEN).
Con este nuevo acuerdo los permisionarios contarán con un marco regulatorio claro, trasparente y congruente para el desarrollo de sus inversiones en beneficio de las actividades productivas de la economía del país.
De acuerdo con el artículo 22 de la LIE, mediante el esquema de abasto aislado, un usuario puede generar energía eléctrica para satisfacer las necesidades de sus actividades productivas, ya sean industriales o comerciales. La energía se puede generar y consumir en un mismo sitio mediante una red eléctrica privada, construida específicamente para desarrollar las actividades de abasto aislado.
Los elementos más relevantes que se precisan con la nueva regulación son:
- Las actividades, características y elementos para el desarrollo de las inversiones en abasto aislado.
- Las actividades para la generación de electricidad y auto consumo por medio del abasto aislado y generación local.
- El papel que asumen los usuarios finales, suministradores y generadores que participen en la actividad de abasto aislado, incluyendo la participación de cada uno en el mercado eléctrico.
- Los pagos que deben realizar los distintos actores, cuando entreguen o reciban energía eléctrica del Sistema Eléctrico Nacional, así como aquellos por participar en el mercado eléctrico.
- El monto de las garantías que deben cubrir los actores del mercado.
- Las diferentes características a considerar para comprar y vender la energía que sobre o falte bajo la modalidad de abasto aislado.
- Los posibles esquemas de negocio para la compra y venta de energía eléctrica mediante el abasto aislado.
Así, el nuevo instrumento regulatorio contribuye al cumplimiento de los objetivos de la Reforma Energética que apuntan al desarrollo eficiente de la industria eléctrica, al brindar mayor certeza sobre los esquemas por los que pueden optar los inversionistas y personas interesadas en realizar proyectos de abasto aislado o generación local, y permitir que los Usuarios Finales seleccionen el esquema que mejor se adapte a sus necesidades de consumo.
El día de hoy, el Diario Oficial de la Federación (DOF) publica el acuerdo aprobado por el Órgano de Gobierno de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) el pasado 27 de octubre sobre los aspectos generales del abasto aislado. Este nuevo instrumento regulatorio dará certeza a los permisionarios en la modalidad de generación de energía eléctrica.
Con base en la Ley de la Industria Eléctrica (LIE), la CRE ha otorgado 45 permisos de generación eléctrica con actividades de abasto aislado, que en su conjunto suman una capacidad autorizada de 638 MW. Estos proyectos representan una inversión aproximada de 1,400 millones de dólares, monto equivalente al 22 por ciento de la inversión de los proyectos adjudicados en las dos primeras Subastas de Largo Plazo.
Cabe mencionar que, previo a la emisión de esta nueva regulación, no existía certeza sobre los distintos modelos de negocio ni sobre las reglas aplicables a esta figura de generación y consumo en sitio que cuenten con sistemas de generación con capacidad mayor a 500kW, tanto por parte de desarrolladores de proyectos, como por usuarios interesados en reducir su consumo de energía eléctrica proveniente del Sistema Eléctrico Nacional (SEN).
Con este nuevo acuerdo los permisionarios contarán con un marco regulatorio claro, trasparente y congruente para el desarrollo de sus inversiones en beneficio de las actividades productivas de la economía del país.
De acuerdo con el artículo 22 de la LIE, mediante el esquema de abasto aislado, un usuario puede generar energía eléctrica para satisfacer las necesidades de sus actividades productivas, ya sean industriales o comerciales. La energía se puede generar y consumir en un mismo sitio mediante una red eléctrica privada, construida específicamente para desarrollar las actividades de abasto aislado.
Los elementos más relevantes que se precisan con la nueva regulación son:
- Las actividades, características y elementos para el desarrollo de las inversiones en abasto aislado.
- Las actividades para la generación de electricidad y auto consumo por medio del abasto aislado y generación local.
- El papel que asumen los usuarios finales, suministradores y generadores que participen en la actividad de abasto aislado, incluyendo la participación de cada uno en el mercado eléctrico.
- Los pagos que deben realizar los distintos actores, cuando entreguen o reciban energía eléctrica del Sistema Eléctrico Nacional, así como aquellos por participar en el mercado eléctrico.
- El monto de las garantías que deben cubrir los actores del mercado.
- Las diferentes características a considerar para comprar y vender la energía que sobre o falte bajo la modalidad de abasto aislado.
- Los posibles esquemas de negocio para la compra y venta de energía eléctrica mediante el abasto aislado.
Así, el nuevo instrumento regulatorio contribuye al cumplimiento de los objetivos de la Reforma Energética que apuntan al desarrollo eficiente de la industria eléctrica, al brindar mayor certeza sobre los esquemas por los que pueden optar los inversionistas y personas interesadas en realizar proyectos de abasto aislado o generación local, y permitir que los Usuarios Finales seleccionen el esquema que mejor se adapte a sus necesidades de consumo.