La mayor petrolera del mundo, Saudi Aramco, reportó que durante el primer semestre del año obtuvo una utilidad neta de 46 mil 900 millones de dólares, un 12% menos debido a la caída en los precios del petróleo.
La petrolera asegura que la caída en sus utilidades se debió principalmente a un retroceso del 4% por ciento en el precio medio del crudo, que pasó de 69 a 66 dólares por barril, y a un incremento de las compras y de los costes de producción, depreciación y amortización.
Los ingresos se ubicaron en 163 mil 880 millones de dólares, cifra por debajo a los 167 mil 680 millones de dólares obtenidos el año pasado.
Pese a la caida de las utilidades, Saudi Aramco anunció un dividendo de 46 mil 400 millones de dólares al gobierno saudí, incluyendo un dividendo extraordinario de 20 mil 000 millones, frente a los 32 mil 000 millones del año anterior, como resultado de su “desempeño financiero excepcionalmente sólido” en 2018.