Rystad Energy publicó un análisis de las inversiones realizadas por los principales operadores en mercado eólico marino, siendo Equinor el que más ha invertido en estas tareas.
Aunque Equinor sigue siendo un líder mundial en el desarrollo de petróleo y gas costa afuera, el operador controlado por el estado noruego ha estado involucrado en el mercado eólico marino durante más de una década.
Los primeros parques eólicos de la compañía se instalaron en aguas del Reino Unido, donde el proyecto Sheringham Shoal de 317 megavatios (MW) entró en pleno funcionamiento ya en 2012.
El proyecto Dudgeon de 402 MW de capacidad y el innovador Hywind Scotland Pilot de 30 MW, una iniciativa pionera de viento flotante, seguido en 2017. En 2019, el parque eólico Arkona Offshore liderado por E.ON entró en funcionamiento, donde Equinor posee una participación del 25%.
A pesar de su presencia establecida en el mercado, el compromiso de Equinor con la energía eólica marina solo ganó una mayor conciencia pública cuando anunció que haría inversiones de capital por 11 mil millones de dólares entre 2020 y 2026 para desarrollar su proyecto gigante del Banco Dogger en aguas del Reino Unido.
El tamaño de la inversión fue revelador, lo que la convirtió en la mayor inversión offshore de Equinor en el período, superando incluso a los principales proyectos de petróleo y gas. Se espera que Dogger Bank, que consta de tres fases igualmente grandes con 1200 MW de capacidad cada una, contribuya con alrededor del 15% de la capacidad instalada total del Reino Unido tras la puesta en marcha completa, lo que convierte a Equinor en un jugador clave en el mercado eólico marino del país.
Rystad Energy publicó un análisis de las inversiones realizadas por los principales operadores en mercado eólico marino, siendo Equinor el que más ha invertido en estas tareas.
Aunque Equinor sigue siendo un líder mundial en el desarrollo de petróleo y gas costa afuera, el operador controlado por el estado noruego ha estado involucrado en el mercado eólico marino durante más de una década.
Los primeros parques eólicos de la compañía se instalaron en aguas del Reino Unido, donde el proyecto Sheringham Shoal de 317 megavatios (MW) entró en pleno funcionamiento ya en 2012.
El proyecto Dudgeon de 402 MW de capacidad y el innovador Hywind Scotland Pilot de 30 MW, una iniciativa pionera de viento flotante, seguido en 2017. En 2019, el parque eólico Arkona Offshore liderado por E.ON entró en funcionamiento, donde Equinor posee una participación del 25%.
A pesar de su presencia establecida en el mercado, el compromiso de Equinor con la energía eólica marina solo ganó una mayor conciencia pública cuando anunció que haría inversiones de capital por 11 mil millones de dólares entre 2020 y 2026 para desarrollar su proyecto gigante del Banco Dogger en aguas del Reino Unido.
El tamaño de la inversión fue revelador, lo que la convirtió en la mayor inversión offshore de Equinor en el período, superando incluso a los principales proyectos de petróleo y gas. Se espera que Dogger Bank, que consta de tres fases igualmente grandes con 1200 MW de capacidad cada una, contribuya con alrededor del 15% de la capacidad instalada total del Reino Unido tras la puesta en marcha completa, lo que convierte a Equinor en un jugador clave en el mercado eólico marino del país.