Por: Armando Flores
El gobierno de México está cambiando su enfoque sobre las energías renovables y eso está provocando incertidumbre en las inversiones, coincidieron los participantes en el Panel Generación Distribuida, una oportunidad para el sector empresarial, durante el Encuentro Internacional de Energía México 2019.
Israel Hurtado, secretario ejecutivo de Asolmex, consideró lamentable este momento de duda, cuando la tendencia mundial camina hacia las tecnologías renovables. “En muchos países de Europa, ya están apostando y operando con tecnología limpia. Por ejemplo, Dinamarca ya está casi al 80%… Pero sí hay (en México) un cambio de enfoque y eso hace que sea más difícil, eso hace que no haya un clima propicio para las inversiones”.
En dicho panel también participaron José Luis Fernández Zayas, Investigador del Instituto de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); Víctor Ramírez, especialista en el sector energético; Aitana Velázquez, gerente de Relaciones Institucionales de Enlight; y Aarón Sánchez, investigador del Instituto de Energías Renovables, también de la UNAM.
Israel Hurtado advirtió que a las energías renovables nadie las va a parar. Puso como ejemplo que en 2007 se registró el primer contrato de interconexión para paneles solares y hasta noviembre pasado ya había 113 mil; en 2003, operó la primera central solar, hoy hay 58.
“Aun cuando las políticas cambien, esto va a seguir creciendo porque es inevitable… aunque la incertidumbre, no ayuda nada. Además, los precios y seguridad de suministro de la energía solar va en franca mejoría y ese es el enfoque que México debería seguir”.
Aarón Sánchez, Investigador del Instituto de Energías Renovables de la UNAM, destacó que los generadores de energía solar deberían buscar el erradicar el desconocimiento sobre esta tecnología.
Uno de ellos es que los sistemas fotovoltaicos son caros. “Si bien la primera inversión puede parecer fuerte, hay que saberle explicar al cliente, cómo recuperará su inversión. Otro es sobre la tasa de retorno. Es muy buena, pero tiene que ir ahorrando lo que se evita pagar en facturación para poder ver su inversión”, detalló.
Recordó que el inversionista está esperando este retorno en el corto plazo y hay que erradicar esas falsas ideas. “Sin embargo, todavía existe un enorme desconocimiento técnico por parte de las empresas que venden estas tecnologías y las operan. Yo vi cómo se formaron empresas que vendían ladrillos en instaladores fotovoltaicos; vi cómo transformaban albañiles que metían cables en una instalación eléctrica residencial en instaladores fotovoltaicos”.
Y añadió: “Eso ocasiona que en menos de un año o dos, se tengan problemas con un sistema que cuando está bien instalado, con todas las regulaciones pertinentes, tendrá todas las características de confiabilidad, seguridad y viabilidad”.
Víctor Ramírez, especialista en el sector energético, destacó en este sentido que en el país hay entre 3,000 y 6,000 empresas que instalan este tipo de tecnología, pero que en realidad sólo 50 pueden considerarse serias. “La mayoría son el plomero, que hoy es plomero y mañana es taxista, y pasado mañana instala paneles solares”.
Consideró que todos tienen derecho al trabajo, pero si no lo hacen con seriedad y generan un historial de malas instalaciones, pues el usuario final tendrá desconfianza. “Debemos trabajar para que se cierre el mercado, no de una forma discriminatoria, sino entre quienes lo hacen bien, que demuestren buenas capacidades para hacer buenas instalaciones. Esa es una de las razones por las cuales hasta ahora todavía no superamos los 120 mil usuarios de energía solar, cuando existen 4 millones potenciales”.
José Luis Fernández Zayas, Investigador del Instituto de Ingeniería de la UNAM, destacó que un consumidor sólo le compra a quien le da confianza. “Hay amigos que dicen que ponen sistemas solares para bajar la huella de carbono ¿qué es eso? En realidad, no importa, lo importante es tener un buen servicio que me satisfaga”.
Aitana Velázquez, gerente de Relaciones Institucionales de Enlight, consideró que sigue faltando una regulación de energía solar, tanto residencial, como industrial. “Parques industriales hay muchas oportunidades para explorar y traer todo este beneficio de la generación distribuida”.
Sobre la incertidumbre que vive hoy día el sector energético en general, y las energías renovables en particular, concluyó: “No se sabe qué va a pasar, ya no se habla de renovables, ni de solar, pero sí hay un mercado que se está fortaleciendo”.