Tras el reciente anuncio de la entrada en vigor de la fase 2 de contingencia sanitaria y la declaración de estado de emergencia en México, nuestro país ha visto experimentado una importante afectación en su economía.
En este orden de ideas, el sector hidrocarburos ha sido uno de los más afectados. En primer lugar, la baja del costo de la gasolina originada por la reducción del precio del petróleo a nivel internacional sin duda fue un efecto alentador para los consumidores finales, sin embargo, aunque esto ayuda a la economía familiar, la paradoja se presenta cuando al ser decretada la cuarentena por el COVID-19 las estaciones de servicio en nuestro país han experimentado una baja en la venta de combustible.
De acuerdo con datos de Grupo Ciita empresa encabezada por Beatriz Marcelino Estrada destacan que tan solo en el mes de marzo las ventas de gasolina magna y Diésel éstas han caído hasta en un 50% mientras que en el caso de la premium ésta ha llegado a niveles de 70% de baja en la comercialización de este producto. A la par de estas cifras, es importante mencionar que las estaciones de servicio también han experimentado un aumentado de gastos en un 20% para la contingencia por la compra de materiales de sanitización, gel antibacterial, cubrebocas guantes.
En fechas recientes el gobierno federal anunció que el periodo de resguardo en casa se amplia al 30 de abril de 2020 motivo por el cual estimaciones de Grupo Ciita prevén que esta ola de baja en la venta de combustibles aumente en los porcentajes antes mencionados e incluso se extienda al sector de gaseros quienes ante el cierre de plazas comerciales, restaurantes, comercios, gimnasios y tiendas experimentarán una reducción de ventas de este energético en más de un 60% tan solo en la primera semana de abril.
En el segmento de Gas LP la venta de este producto presenta también afectaciones considerables, ya que la comercialización de éste ha disminuido en un 30% en expendio de gas LP y un 45% hasta el momento en distribución con pipas por el cierre de establecimientos. Debido a que muchos más comercios han cerrado la estimación de a cuanto aumente la baja de ventas de gas LP es de hasta un 65% a 70% en las próximas semanas.
La presente situación también golpea a las diversas marcas de combustibles que actualmente tenemos en nuestro país ya que al haber poca demanda del producto éstas se ven obligadas a reducir sus precios para entrar en un tema de competencia por precio ante el consumidor.
“Uno de los efectos colaterales que tenemos en este momento es que existe producto almacenado de hace tiempo y por lo tanto el empresario gasolinero ve mermada su utilidad ya que, hasta antes de la cuarentena, las estaciones de servicio compraron hidrocarburo a un precio y ahora éste se ha modificado.” Explicó Beatriz Marcelino Estrada Directora de Grupo Ciita.
De las 12,607 estaciones de servicio que actualmente existen en nuestro país, al día de hoy tan solo en la ciudad de México más de 600 de ellas ya se encuentran afectadas y 500 más en el Estado de México.
Pero la realidad de una estación de servicio no solo se circunscribe a lo que vende al público en general. El ecosistema que encontramos en una gasolinería es más amplio puesto que están también los empleos del personal y las normatividades que éstos deben mantenerse cumpliendo en estos días.
En el rubro de los despachadores datos de Grupo Ciita reportan que la afectación al personal es amplia ya que éstos han visto disminuidos sus ingresos hasta en un 80%