La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus socios tienen en estos momentos una reunión de emergencia para concretar el acuerdo que se tuvo el jueves y que ha estado detenido por la posición de México de no recortar el 23% de su producción.
La posición de México no ha sido del agrado de Arabia Saudita, quien insiste que los 23 países que participaron en la reunión deben de apegarse al recorte del 23% en la producción sobre lo extraído en octubre de 2018.
La reunión de hoy tiene como objetivo confirmar el acuerdo que permitiría recortar 9.7 millones de barriles a la producción mundial y de esta forma estabilizar el precio del petróleo.
La nueva propuesta es ajustar a la baja el acuerdo para que nuestro país corte la producción en 100 mil barriles diarios.
Este nuevo acuerdo se traduce en una reducción de casi 19 millones de barriles sobre la producción que se espera en mayo.
Durante el fin de semana, Estados Unidos y Rusia han tratado de convencer a Arabia Saudita de que acepte que México recorte su producción en 100 mil barriles y 250 mil barriles restantes sean absorbidos por Estados Unidos.
El acuerdo es muy importante para la economía mundial ya que pone en riesgo la continuidad de una gran cantidad de empresas petroleras alrededor del mundo.
Al parecer con esto se sortearía el principal obstáculo para que se concrete el mayor acuerdo petrolero de la historia.
Arabia Saudita tiene especial interés que en las próximas tres horas se anunció el acuerdo, antes de que inicien las cotizaciones del Brent en el mercado internacional.