El sistema “Renora” puede almacenar energía eléctrica en el mar e irse administrando de acuerdo con las necesidades.
El sistema ‘Remora’, diseñado por la compañía tecnológica francesa Segula, permite superar uno de los principales problemas de la energía eléctrica, su almacenaje, mediante su conversión en aire comprimido, que puede ser acumulado en el mar y reconvertido en energía según la necesidad.
A pesar de que las energías renovables representan una solución clave en la lucha contra el calentamiento global, su desarrollo sigue condicionado por la intermitencia de su producción en función de las condiciones meteorológicas y la dificultad de almacenar la electricidad generada.
Este diseño tecnológico busca superar este problema en el ámbito de los aerogeneradores marinos, permitiendo el desarrollo de la energía eólica marina renovable mediante una solución para el almacenamiento masivo que utiliza aire comprimido cerca de la costa y de esta manera asegura la disponibilidad de la electricidad sostenible.
En primer lugar, la energía eléctrica llega hasta una plataforma flotante a través de un cable submarino desde una fuente de producción renovable, como por ejemplo una turbina eólica o un panel solar.
Después, esa electricidad se utiliza para bombear agua dentro de una cámara que, al llenarse, genera aire comprimido que es almacenado en unos depósitos situados a una profundidad de entre 70 y 200 metros bajo la superficie e instalados próximos al litoral.
Además, los tanques submarinos que acumulan el aire comprimido son de hormigón, un material colonizable por la fauna y flora marinas, que ya ha sido utilizado para crear arrecifes artificiales.
En el momento en el que se necesita recuperar la energía, el aire comprimido se rescata mediante el mismo proceso, pero a la inversa, ya que pasa otra vez a través de las cámaras y empuja el agua que a su vez hace girar las turbinas y los generadores eléctricos.
El sistema “Renora” puede almacenar energía eléctrica en el mar e irse administrando de acuerdo con las necesidades.
El sistema ‘Remora’, diseñado por la compañía tecnológica francesa Segula, permite superar uno de los principales problemas de la energía eléctrica, su almacenaje, mediante su conversión en aire comprimido, que puede ser acumulado en el mar y reconvertido en energía según la necesidad.
A pesar de que las energías renovables representan una solución clave en la lucha contra el calentamiento global, su desarrollo sigue condicionado por la intermitencia de su producción en función de las condiciones meteorológicas y la dificultad de almacenar la electricidad generada.
Este diseño tecnológico busca superar este problema en el ámbito de los aerogeneradores marinos, permitiendo el desarrollo de la energía eólica marina renovable mediante una solución para el almacenamiento masivo que utiliza aire comprimido cerca de la costa y de esta manera asegura la disponibilidad de la electricidad sostenible.
En primer lugar, la energía eléctrica llega hasta una plataforma flotante a través de un cable submarino desde una fuente de producción renovable, como por ejemplo una turbina eólica o un panel solar.
Después, esa electricidad se utiliza para bombear agua dentro de una cámara que, al llenarse, genera aire comprimido que es almacenado en unos depósitos situados a una profundidad de entre 70 y 200 metros bajo la superficie e instalados próximos al litoral.
Además, los tanques submarinos que acumulan el aire comprimido son de hormigón, un material colonizable por la fauna y flora marinas, que ya ha sido utilizado para crear arrecifes artificiales.
En el momento en el que se necesita recuperar la energía, el aire comprimido se rescata mediante el mismo proceso, pero a la inversa, ya que pasa otra vez a través de las cámaras y empuja el agua que a su vez hace girar las turbinas y los generadores eléctricos.