El principal oleoducto de combustibles en los Estados Unidos estará fuera de operación varios días debido al hackeo que sufrió.
El oleoducto más grande de combustibles en los Estados Unidos no reanudará operaciones en varios días debido al ciberataque con ransomware que sufrió a finales de la semana pasada.
El Colonial Pipeline suministra de combustibles a las principales ciudades de la costa este de los Estados Unidos.
Aún no se ha determinado el impacto de la pérdida de producción y el aumento de los precios del combustible, dijeron analistas.
La empresa que opera el ducto dijo el lunes que está trabajando para reiniciar los trabajos en fases con “el objetivo de restaurar sustancialmente el servicio operativo para el final de la semana”.
El FBI atribuyó el ciberataque a DarkSide, un grupo que se cree tiene su sede en Rusia o Europa del Este.
Su ransomware apunta a computadoras que no usan teclados en los idiomas de las ex repúblicas soviéticas, dijeron expertos cibernéticos.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo que hasta el momento no había evidencia de que el gobierno ruso estuviera involucrado.
“Hasta ahora nuestra gente de inteligencia no tiene evidencia de que Rusia esté involucrada, aunque hay evidencia de que los actores están en Rusia”, dijo Biden.
El principal oleoducto de combustibles en los Estados Unidos estará fuera de operación varios días debido al hackeo que sufrió.
El oleoducto más grande de combustibles en los Estados Unidos no reanudará operaciones en varios días debido al ciberataque con ransomware que sufrió a finales de la semana pasada.
El Colonial Pipeline suministra de combustibles a las principales ciudades de la costa este de los Estados Unidos.
Aún no se ha determinado el impacto de la pérdida de producción y el aumento de los precios del combustible, dijeron analistas.
La empresa que opera el ducto dijo el lunes que está trabajando para reiniciar los trabajos en fases con “el objetivo de restaurar sustancialmente el servicio operativo para el final de la semana”.
El FBI atribuyó el ciberataque a DarkSide, un grupo que se cree tiene su sede en Rusia o Europa del Este.
Su ransomware apunta a computadoras que no usan teclados en los idiomas de las ex repúblicas soviéticas, dijeron expertos cibernéticos.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo que hasta el momento no había evidencia de que el gobierno ruso estuviera involucrado.
“Hasta ahora nuestra gente de inteligencia no tiene evidencia de que Rusia esté involucrada, aunque hay evidencia de que los actores están en Rusia”, dijo Biden.