La decisión del voto es personal, libre y secreta; así como una responsabilidad cívica que como mexicanos debemos ejercer con base a nuestro libre albedrío y a las propuestas que consideremos sean las mejores para el futuro de nuestro país.
En 1936, los juegos olímpicos se celebraron en la ciudad de Berlín (tres años ante del inicio de la Segunda Guerra Mundial). El régimen alemán de Adolfo Hitler buscaba utilizar la justa olímpica como una estrategia de propaganda respecto a su partido, sin embargo, para su sorpresa, Jesse Owens (atleta afroamericano) se alzó como la máxima figura del evento.
En estos meses en nuestro país, hemos visto la mayor cantidad de propaganda política en la historia de México, con la finalidad de convencernos respecto a nuestra decisión electoral del próximo 6 de junio (se votarán cerca de 21 mil cargos de elección popular).
Cabe recordar que hace 3 años se registró la mayor participación en la historia de nuestra democracia debido al número de personas que ejercieron su derecho al voto en términos absolutos. Para estas elecciones -intermedias- se tiene un registro récord de 95 millones de mexicanos que podrán votar, esperando que en términos relativos se pueda reducir el abstencionismo de nuestra última elección (alrededor del 35%).
La decisión del voto es personal, libre y secreta; así como una responsabilidad cívica que como mexicanos debemos ejercer con base a nuestro libre albedrío y a las propuestas que consideremos sean las mejores para el futuro de nuestro país. En particular, los invito a que analicen lo que cada uno de los candidatos en su lugar de residencia propone respecto a nuestro sector energético, así como respecto al potencial de las renovables que tenemos por aprovechar en nuestro país.
Regresando a la Olimpiada de Berlín, Owens ganó 4 medallas de oro representando a los Estados Unidos (salto de longitud, relevos 4 por 100, 100 y 200 metros planos). Cabe señalar que su principal rival el alemán “Luz” Long era el favorito por ser local y por contar con el respaldo del público. Durante la competencia olímpica, Jesse y “Luz” forjaron una amistad que nació del espíritu deportivo del alemán en reconocimiento del atleta afroamericano tras imponer varios récords mundiales durante la justa olímpica.
Actualmente, la polarización que tristemente vive México es una situación sin precedentes en los últimos 50 años. Las referencias despectivas de “chairos” o “fifís” que hoy parecen el común denominador de cualquier conversación en nuestro país han dado pie a pensar que los “mexicanos” somos más o menos “mexicanos” con base en nuestras diferencias raciales, culturales, sociales, económicas y políticas.
Si bien la diversidad de opiniones, la riqueza cultural de nuestro país, así como la amplitud (geográfica y étnica) de nuestro territorio da pie a que podamos enriquecer nuestro criterio como “mexicanos”, también es cierto que, del 2018 a la fecha, estos factores han generado más desencuentros que coincidencias entre nosotros mismos a favor de México.
Como ejemplo tenemos el debate que parece darse en el sector eléctrico mexicano ¿CFE es enemiga de las energías limpias teniendo el talento técnico y operativo de centrales hidroeléctricas, nucleares y geotérmicas a lo largo de todo el país? ¿Los inversionistas privados dejarán de invertir en México considerando el potencial solar y eólico que han desarrollado en los últimos años? ¿Han escuchado a algún candidato de los distintos partidos políticos plantear la posibilidad de la colaboración entre el sector público y el sector privado en beneficio de nuestro sector energético?
Regresando a la figura de los juegos olímpicos de Berlín, si bien es cierto que Adolfo Hitler no se mostró contento con tener que reconocer su victoria en territorio alemán, Owens comenta en sus memorias que a diferencia del reconocimiento que obtuvo por parte del mundo y de Alemania, el presidente de Estados Unidos -Franklin Roosevelt- nunca lo recibió en la Casa Blanca ni tampoco le mandó una felicitación por escrito.
A pesar de su destacada trayectoria deportiva, nunca recibió una beca atlética por parte de su universidad; asimismo, mientras que en Alemania a Jesse se le había permitido viajar y alojarse en los mismos hoteles que los atletas blancos, al regresar a su país natal, se le negó la entrada por la puerta principal del Hotel Waldorf Astoria -lugar donde se otorgaron los reconocimientos a los medallistas estadounidenses de la Olimpiada de 1936-.
En pocos días tendremos la opción de ejercer nuestro derecho electoral como ciudadanos mexicanos, y así como el multimedallista olímpico Jesse Owens recibió el reconocimiento del mundo (incluyendo parte de Alemania y parte de los Estados Unidos), nosotros no podemos dejar pasar la oportunidad de vencer al principal rival de cualquier elección: “el abstencionismo” … ¡¡¡TODOS A VOTAR ESTE 6 DE JUNIO!!!
La decisión del voto es personal, libre y secreta; así como una responsabilidad cívica que como mexicanos debemos ejercer con base a nuestro libre albedrío y a las propuestas que consideremos sean las mejores para el futuro de nuestro país.
En 1936, los juegos olímpicos se celebraron en la ciudad de Berlín (tres años ante del inicio de la Segunda Guerra Mundial). El régimen alemán de Adolfo Hitler buscaba utilizar la justa olímpica como una estrategia de propaganda respecto a su partido, sin embargo, para su sorpresa, Jesse Owens (atleta afroamericano) se alzó como la máxima figura del evento.
En estos meses en nuestro país, hemos visto la mayor cantidad de propaganda política en la historia de México, con la finalidad de convencernos respecto a nuestra decisión electoral del próximo 6 de junio (se votarán cerca de 21 mil cargos de elección popular).
Cabe recordar que hace 3 años se registró la mayor participación en la historia de nuestra democracia debido al número de personas que ejercieron su derecho al voto en términos absolutos. Para estas elecciones -intermedias- se tiene un registro récord de 95 millones de mexicanos que podrán votar, esperando que en términos relativos se pueda reducir el abstencionismo de nuestra última elección (alrededor del 35%).
La decisión del voto es personal, libre y secreta; así como una responsabilidad cívica que como mexicanos debemos ejercer con base a nuestro libre albedrío y a las propuestas que consideremos sean las mejores para el futuro de nuestro país. En particular, los invito a que analicen lo que cada uno de los candidatos en su lugar de residencia propone respecto a nuestro sector energético, así como respecto al potencial de las renovables que tenemos por aprovechar en nuestro país.
Regresando a la Olimpiada de Berlín, Owens ganó 4 medallas de oro representando a los Estados Unidos (salto de longitud, relevos 4 por 100, 100 y 200 metros planos). Cabe señalar que su principal rival el alemán “Luz” Long era el favorito por ser local y por contar con el respaldo del público. Durante la competencia olímpica, Jesse y “Luz” forjaron una amistad que nació del espíritu deportivo del alemán en reconocimiento del atleta afroamericano tras imponer varios récords mundiales durante la justa olímpica.
Actualmente, la polarización que tristemente vive México es una situación sin precedentes en los últimos 50 años. Las referencias despectivas de “chairos” o “fifís” que hoy parecen el común denominador de cualquier conversación en nuestro país han dado pie a pensar que los “mexicanos” somos más o menos “mexicanos” con base en nuestras diferencias raciales, culturales, sociales, económicas y políticas.
Si bien la diversidad de opiniones, la riqueza cultural de nuestro país, así como la amplitud (geográfica y étnica) de nuestro territorio da pie a que podamos enriquecer nuestro criterio como “mexicanos”, también es cierto que, del 2018 a la fecha, estos factores han generado más desencuentros que coincidencias entre nosotros mismos a favor de México.
Como ejemplo tenemos el debate que parece darse en el sector eléctrico mexicano ¿CFE es enemiga de las energías limpias teniendo el talento técnico y operativo de centrales hidroeléctricas, nucleares y geotérmicas a lo largo de todo el país? ¿Los inversionistas privados dejarán de invertir en México considerando el potencial solar y eólico que han desarrollado en los últimos años? ¿Han escuchado a algún candidato de los distintos partidos políticos plantear la posibilidad de la colaboración entre el sector público y el sector privado en beneficio de nuestro sector energético?
Regresando a la figura de los juegos olímpicos de Berlín, si bien es cierto que Adolfo Hitler no se mostró contento con tener que reconocer su victoria en territorio alemán, Owens comenta en sus memorias que a diferencia del reconocimiento que obtuvo por parte del mundo y de Alemania, el presidente de Estados Unidos -Franklin Roosevelt- nunca lo recibió en la Casa Blanca ni tampoco le mandó una felicitación por escrito.
A pesar de su destacada trayectoria deportiva, nunca recibió una beca atlética por parte de su universidad; asimismo, mientras que en Alemania a Jesse se le había permitido viajar y alojarse en los mismos hoteles que los atletas blancos, al regresar a su país natal, se le negó la entrada por la puerta principal del Hotel Waldorf Astoria -lugar donde se otorgaron los reconocimientos a los medallistas estadounidenses de la Olimpiada de 1936-.
En pocos días tendremos la opción de ejercer nuestro derecho electoral como ciudadanos mexicanos, y así como el multimedallista olímpico Jesse Owens recibió el reconocimiento del mundo (incluyendo parte de Alemania y parte de los Estados Unidos), nosotros no podemos dejar pasar la oportunidad de vencer al principal rival de cualquier elección: “el abstencionismo” … ¡¡¡TODOS A VOTAR ESTE 6 DE JUNIO!!!