Dada la gran cantidad de recursos prospectivos que se cree que están en los campos que están siendo explorados por empresas privadas, el éxito podría cambiar las reglas del juego para México.
La consultora de energía Rystad Energy cree que el 2021 será un año crucial para el sector Upstream en México. Debido a la gran cantidad de recursos prospectivos que se esperan se encuentren en los campos de los operadores privados, el éxito de ellos podría cambiar las reglas impuestas por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Con base en información de la consultora, las petroleras internacionales son responsables del 40% de los recursos descubiertos en México durante los últimos cinco años.
Sin embargo, a pesar del aumento en la actividad de exploración de Pemex y las empresas privadas, la producción esperada de México no es probable que cumpla con las expectativas de la actual administración y no ha alcanzado las estimaciones previas.
Exploración de aguas poco profundas, fundamental
Los datos de Rystad Energy proyectan que la producción nacional de crudo sea de 1.75 millones de barriles diarios en 2025 y quede por debajo de los 2.3 millones de barriles esperados por la administración de López Obrador.
“Creemos que el éxito en la exploración de aguas poco profundas es fundamental para compensar las disminuciones existentes en México”, dijo Ashutosh Singh, gerente de Platts Analytics de producción de petróleo y gas fuera de la OPEP. “Los proyectos en aguas poco profundas pueden entrar en funcionamiento en un plazo mucho más corto en comparación con los proyectos en aguas profundas. También son menos costosos, más cercanos a la infraestructura y menos desafiantes técnicamente de poner en funcionamiento”.
Zama el factor clave
Los analistas de Rystad creen que el mega yacimiento Zama sea el factor clave para incrementar la producción de crudo del país.
Sin embargo, para ello, se debe de resolver el proceso de unificación que mantiene Pemex y Talos Energy desde hace más de dos años y que no ha podido ser concluido.
Talos Energy informó a la Security Exchange Commission (SEC) que continúa trabajando de la mano de la empresa poductiva del Estado para completar la unificación más allá de la fecha límite de marzo de 2021 previamente establecida por la Secretaría de Energía (Sener) de México.
Un acuerdo de unificación final abordará la operación, las divisiones iniciales de intereses de participación y el mecanismo para volver a determinar la participación divisiones de interés en el futuro, entre otros temas clave, informó la empresa en un comunicado.
Poco interés para invertir
En marzo, la empresa informó que venció el nuevo plazo de las negociaciones del acuerdo de unificación de Zama, el primer yacimiento compartido de crudo en México producto de la Reforma Energética, que incluye quién se hará cargo de la operación del campo.
Pemex y el consorcio Bloque 7, integrado por Talos y sus socios Premier Oil y Wintershall Dea, no propusieron una UUOA a la SENER dentro del plazo inicial establecido por los lineamientos de unificación, que terminaron el 25 de marzo de 2021.
Si a Talos se le permite operar su descubrimiento, otras empresas se sentirán cómodas invirtiendo en el país. De lo contrario, quedará poco interés para que otros inviertan en exploración, dijo Ravi.
La inversión final
“El inicio oportuno del campo Zama en los próximos meses es fundamental para nuestras perspectivas”, dijo Singh, señalando que Talos está planificando su decisión de inversión final para fin de año.
“Si hay más demoras en llegar a un acuerdo de unificación entre Pemex y Talos, el cronograma de la FID podría deslizarse, poniendo en riesgo incluso llegar al nivel de 1,75 millones de b / d para 2025”, concluyó.