Mezcla mexicana perdió 2.74% y cae del piso de los 77 dólares por barril.
La mezcla mexicana de petróleo registró una pérdida de 2.74% o 2.13 dólares frente al precio de cierre del viernes, al cotizarse en el mercado energético internacional en 75.47 dólares por barril, informó Petróleos Mexicanos (Pemex).
El exceso de inventarios petroleros en Estados Unidos provocaron que la mezcla mexicana acumule dos jornadas a la baja.
Con el resultado obtenido hoy, la mezcla mexicana de petróleo alcanzó promedio anual a 63.93 dólares por barril.
El petróleo WTI cerró este miércoles con una caída del 3.6% y se situó en 80.86 dólares, arrastrado por un incremento superior al esperado en las reservas de crudo de Estados Unidos.
Mientras que el Brent para entrega en diciembre terminó este miércoles en 2.92%, para cotizar en 82.26 dólares por barril.
Por otra parte, los contratos de gas natural para entrega en diciembre subieron 13 centavos, hasta 5.67 dólares por cada mil pies cúbicos,.
Mientras que los contratos de gasolina con vencimiento el mismo mes bajaron 11 centavos hasta 2.34 dólares el galón.
El petróleo atravesó una mala jornada por el incremento de 3.3 millones de barriles de crudo en las reservas durante la semana pasada, según reportó hoy la Administración de Información Energética.
Al mismo tiempo, las reservas de gasolina han caído a sus niveles más bajos en prácticamente cuatro años.
Además del dato de las reservas, el mercado estuvo pendiente de la reunión de política monetaria de la Reserva Federal, en la que el banco central ha anunciado el inicio de la reducción de las compras mensuales de bonos.
En cuanto al encuentro de la OPEP+ de mañana, se prevé que el grupo mantenga su aumento de producción progresivo previamente pactado.
No obstante, los expertos apuntan a especulaciones sobre la posibilidad de que Estados Unidos libere crudo de sus reservas estratégicas para calmar los precios.
Mientras tanto, el aumento de casos de COVID-19 en algunas partes de China preocupa a los inversores por el riesgo de que sus autoridades impongan restricciones que reduzcan el consumo de petróleo, especialmente en el sector de la aviación.
Mezcla mexicana perdió 2.74% y cae del piso de los 77 dólares por barril.
La mezcla mexicana de petróleo registró una pérdida de 2.74% o 2.13 dólares frente al precio de cierre del viernes, al cotizarse en el mercado energético internacional en 75.47 dólares por barril, informó Petróleos Mexicanos (Pemex).
El exceso de inventarios petroleros en Estados Unidos provocaron que la mezcla mexicana acumule dos jornadas a la baja.
Con el resultado obtenido hoy, la mezcla mexicana de petróleo alcanzó promedio anual a 63.93 dólares por barril.
El petróleo WTI cerró este miércoles con una caída del 3.6% y se situó en 80.86 dólares, arrastrado por un incremento superior al esperado en las reservas de crudo de Estados Unidos.
Mientras que el Brent para entrega en diciembre terminó este miércoles en 2.92%, para cotizar en 82.26 dólares por barril.
Por otra parte, los contratos de gas natural para entrega en diciembre subieron 13 centavos, hasta 5.67 dólares por cada mil pies cúbicos,.
Mientras que los contratos de gasolina con vencimiento el mismo mes bajaron 11 centavos hasta 2.34 dólares el galón.
El petróleo atravesó una mala jornada por el incremento de 3.3 millones de barriles de crudo en las reservas durante la semana pasada, según reportó hoy la Administración de Información Energética.
Al mismo tiempo, las reservas de gasolina han caído a sus niveles más bajos en prácticamente cuatro años.
Además del dato de las reservas, el mercado estuvo pendiente de la reunión de política monetaria de la Reserva Federal, en la que el banco central ha anunciado el inicio de la reducción de las compras mensuales de bonos.
En cuanto al encuentro de la OPEP+ de mañana, se prevé que el grupo mantenga su aumento de producción progresivo previamente pactado.
No obstante, los expertos apuntan a especulaciones sobre la posibilidad de que Estados Unidos libere crudo de sus reservas estratégicas para calmar los precios.
Mientras tanto, el aumento de casos de COVID-19 en algunas partes de China preocupa a los inversores por el riesgo de que sus autoridades impongan restricciones que reduzcan el consumo de petróleo, especialmente en el sector de la aviación.