La OPEP y sus socios prevén que la variante ómicron de COVID-19 no tenga un impacto significativo en la demanda mundial de crudo.
La OPEP+ espera que el impacto de la variante ómicron del coronavirus en el mercado petrolero sea leve y temporal, manteniendo la puerta abierta a un mayor incremento de la producción, según mostró un informe técnico al que tuvo acceso Reuters el domingo.
“Se espera que el impacto de la nueva variante ómicron sea leve y de corta duración, a medida que el mundo se equipa mejor para gestionar el COVID-19 y sus desafíos relacionados”, indicó el informe del Comité Técnico Conjunto (CTC).
“Esto se suma a un panorama económico estable tanto en las economías avanzadas como en las emergentes”, agregó.
La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) se reunirá hoy para discutir el nombramiento de un nuevo secretario general para suceder al nigeriano Mohammad Barkindo.
Esto será seguido el martes por un encuentro de la OPEP y un grupo de aliados liderado por Rusia, conocido como OPEP+, para debatir si siguen adelante con el aumento de los objetivos de producción en 400 mil barriles por día en febrero.
El CTC se reunirá hoy para discutir los fundamentos del mercado y hacer recomendaciones para la reunión de mañana.
En el escenario base del reporte, las existencias de petróleo comercial de la OCDE en 2022 seguirán por debajo del promedio de 2015-2019 en los tres primeros trimestres, y subirá por encima de ese promedio en 24 millones de barriles en el cuarto trimestre.
El escenario asume la liberación de 40 millones de barriles de reservas petroleras estratégicas en la primera mitad del año, y que volverán 13.3 millones de barriles a la reserva estratégica estadounidense en el tercer trimestre.
El informe mantuvo sin cambios las previsiones de crecimiento de la demanda petrolera en 2021 y 2022, a 5.7 millones y 4,2 millones de barriles diarios, respectivamente.