Rystad Energy cree que el precio del petróleo se estabilizará entre 100 y 130 dólares por barril.
Los efectos colaterales en los mercados energéticos globales han sido significativos y multifacéticos. Los precios del petróleo, el gas y el carbón han subido casi a máximos históricos y los metales energéticos también han experimentado una considerable volatilidad de precios, explicó Rystad Energy.
Los precios de los alimentos y los fertilizantes también se están disparando. Rusia y Bielorrusia producen el 37% del suministro mundial de potasa, uno de los tres componentes del fertilizante NPK, mientras que Rusia y Ucrania representaban el 23% de las exportaciones mundiales de trigo antes de la invasión.
Los mercados de productos básicos eficientes y la sustitución podrían amortiguar el impacto, pero el riesgo de una crisis alimentaria se cierne sobre las naciones de bajos ingresos.
Los actores del mercado petrolero están luchando para determinar hasta qué punto las exportaciones y el suministro de petróleo ruso se verán afectados por las sanciones y las interrupciones causadas por la guerra.
“Creemos que los precios del petróleo se mantendrán elevados y se equilibrarán en alrededor de 100 a 130 por barril durante el tercer trimestre de este año, con probabilidad de algunos picos más altos”.
Es probable que el mercado de productos derivados del petróleo se vuelva aún más restringido que los mercados de crudo.
“También vemos una aceleración de la actividad del esquisto estadounidense, con un aumento muy significativo de la producción para fines de este año y en 2023”.
“El mercado del gas es una historia particularmente intrigante. Durante mucho tiempo, Europa ha dependido en gran medida del gas ruso, pero en realidad tiene opciones disponibles, aunque a un precio significativo, que podrían permitirle al continente independizarse del gas ruso en tan solo unos meses”.
Las importaciones de GNL están preparadas para marcar la mayor diferencia, contribuyendo con 50 Bcm adicionales por año, según la propuesta de la Comisión de la Unión Europea.
Creemos que la expansión de las instalaciones de energía renovable de Europa podría acelerarse y ver crecer la capacidad de generación en 650 GW adicionales para 2030, más allá de lo que ya está planificado.
La energía renovable parece estar ganando en todas las dimensiones del trilema energético; no solo es la energía más sostenible y asequible, sino que también proporciona seguridad energética a través de la independencia de Rusia.
Rystad Energy cree que el precio del petróleo se estabilizará entre 100 y 130 dólares por barril.
Los efectos colaterales en los mercados energéticos globales han sido significativos y multifacéticos. Los precios del petróleo, el gas y el carbón han subido casi a máximos históricos y los metales energéticos también han experimentado una considerable volatilidad de precios, explicó Rystad Energy.
Los precios de los alimentos y los fertilizantes también se están disparando. Rusia y Bielorrusia producen el 37% del suministro mundial de potasa, uno de los tres componentes del fertilizante NPK, mientras que Rusia y Ucrania representaban el 23% de las exportaciones mundiales de trigo antes de la invasión.
Los mercados de productos básicos eficientes y la sustitución podrían amortiguar el impacto, pero el riesgo de una crisis alimentaria se cierne sobre las naciones de bajos ingresos.
Los actores del mercado petrolero están luchando para determinar hasta qué punto las exportaciones y el suministro de petróleo ruso se verán afectados por las sanciones y las interrupciones causadas por la guerra.
“Creemos que los precios del petróleo se mantendrán elevados y se equilibrarán en alrededor de 100 a 130 por barril durante el tercer trimestre de este año, con probabilidad de algunos picos más altos”.
Es probable que el mercado de productos derivados del petróleo se vuelva aún más restringido que los mercados de crudo.
“También vemos una aceleración de la actividad del esquisto estadounidense, con un aumento muy significativo de la producción para fines de este año y en 2023”.
“El mercado del gas es una historia particularmente intrigante. Durante mucho tiempo, Europa ha dependido en gran medida del gas ruso, pero en realidad tiene opciones disponibles, aunque a un precio significativo, que podrían permitirle al continente independizarse del gas ruso en tan solo unos meses”.
Las importaciones de GNL están preparadas para marcar la mayor diferencia, contribuyendo con 50 Bcm adicionales por año, según la propuesta de la Comisión de la Unión Europea.
Creemos que la expansión de las instalaciones de energía renovable de Europa podría acelerarse y ver crecer la capacidad de generación en 650 GW adicionales para 2030, más allá de lo que ya está planificado.
La energía renovable parece estar ganando en todas las dimensiones del trilema energético; no solo es la energía más sostenible y asequible, sino que también proporciona seguridad energética a través de la independencia de Rusia.
