No hacen falta cambios Constitucionales para incentivar energías limpias, pero para erigir al monopolio sí.
Mariano Calderón, socio experto en materia constitucional de la firma legal Santamarina y Steta señaló que los posibles “ajustes” que se están dando a conocer de la iniciativa de reforma eléctrica son “un maquillaje verde que pretende filtrar a todo un monstruo de monopolio de Estado”.
El especialista explicó que es bueno incorporar estímulos fiscales en ISR e IVA para la compra de vehículos eléctricos, pero ello no compensa en nada el daño y desastre que significa la intención de regresar a un monopolio y monopsonio. “
“Para establecer un estímulo no es necesario reformar Constitución. No es un tema constitucional. Ya existen estímulos. El daño de la iniciativa de reforma constitucional en nada se compara con el beneficio mínimo que pueden representar los estímulos para la compra de los vehículos eléctricos” dijo.
Mariano Calderón señaló que lo mismo ocurre respecto de los incentivos para el desarrollo de tecnología en motores eléctricos y la revisión de tarifas, que tampoco son materia para reformas constitucionales.
“Basta con una reforma legal y no mitiga el daño de fondo que traería una reforma constitucional que sí se requiere para erigir un monopolio de Estado. Con eso se daña todo el sistema eléctrico y también se golpea la certidumbre del Estado de Derecho en México. Por consiguiente, los proyectos de inversión del sector energético y otras varias industrias”, subrayó.
Adicionalmente, el experto aclaró que incorporar un derecho humano a la electricidad no es más que un buen deseo y letra muerta.
Si no hay presupuesto para hacerlo efectivo, no sirve de nada. No tiene efecto.
“De hecho, la iniciativa de reforma tal y como está, incluso se contrapone con tal derecho, porque al hacer menos competitivo al sistema eléctrico, hace menos viable surtir electricidad en el futuro y va en contra de que los consumidores puedan escoger a quien comprar. Establecer un monopolio/monopsonio es contrario a fomentar el derecho humano a la electricidad”, concluyó.
No hacen falta cambios Constitucionales para incentivar energías limpias, pero para erigir al monopolio sí.
Mariano Calderón, socio experto en materia constitucional de la firma legal Santamarina y Steta señaló que los posibles “ajustes” que se están dando a conocer de la iniciativa de reforma eléctrica son “un maquillaje verde que pretende filtrar a todo un monstruo de monopolio de Estado”.
El especialista explicó que es bueno incorporar estímulos fiscales en ISR e IVA para la compra de vehículos eléctricos, pero ello no compensa en nada el daño y desastre que significa la intención de regresar a un monopolio y monopsonio. “
“Para establecer un estímulo no es necesario reformar Constitución. No es un tema constitucional. Ya existen estímulos. El daño de la iniciativa de reforma constitucional en nada se compara con el beneficio mínimo que pueden representar los estímulos para la compra de los vehículos eléctricos” dijo.
Mariano Calderón señaló que lo mismo ocurre respecto de los incentivos para el desarrollo de tecnología en motores eléctricos y la revisión de tarifas, que tampoco son materia para reformas constitucionales.
“Basta con una reforma legal y no mitiga el daño de fondo que traería una reforma constitucional que sí se requiere para erigir un monopolio de Estado. Con eso se daña todo el sistema eléctrico y también se golpea la certidumbre del Estado de Derecho en México. Por consiguiente, los proyectos de inversión del sector energético y otras varias industrias”, subrayó.
Adicionalmente, el experto aclaró que incorporar un derecho humano a la electricidad no es más que un buen deseo y letra muerta.
Si no hay presupuesto para hacerlo efectivo, no sirve de nada. No tiene efecto.
“De hecho, la iniciativa de reforma tal y como está, incluso se contrapone con tal derecho, porque al hacer menos competitivo al sistema eléctrico, hace menos viable surtir electricidad en el futuro y va en contra de que los consumidores puedan escoger a quien comprar. Establecer un monopolio/monopsonio es contrario a fomentar el derecho humano a la electricidad”, concluyó.