Hungría y Eslovaquia tendrán más tiempo para dejar la dependencia de petróleo Ruso.
Debido a la resistencia de Hungría y Eslovaquia de dejar de importar petróleo ruso, la Unión Europea plantea cambios en la propuesta para vetar los hidrocarburos de ese país.
Ambos países europeos son altamente dependientes del petróleo y gas de Rusia, lo que dificulta el dejar de importar los energéticos rápidamente.
Hungría ha dicho que necesitaría por lo menos cinco años para dejar de importar petróleo de Moscú, debido a falta de infraestructura de almacenamiento y la reconfiguración de refinerías, las cuales están equipadas para procesar crudo ruso.
En la nueva propuesta, la Comisión Europea plantea dar más tiempo a ambos países para dejar paulatinamente la dependencia del petróleo ruso.
Con la nueva propuesta, Hungría y Eslovaquia podrán comprar petróleo ruso a través de oleoductos hasta finales del 2024, mientras que por otras vías lo podrán hacer hasta mediados de ese mismo año.
El resto de los países deberán de vetar las compras de petróleo ruso en los siguientes seis meses tras la aprobación del sexto paquete de sanciones. La UE espera dejar de importar totalmente crudo antes de que finalice el 2022.
Hungría y Eslovaquia tendrán más tiempo para dejar la dependencia de petróleo Ruso.
Debido a la resistencia de Hungría y Eslovaquia de dejar de importar petróleo ruso, la Unión Europea plantea cambios en la propuesta para vetar los hidrocarburos de ese país.
Ambos países europeos son altamente dependientes del petróleo y gas de Rusia, lo que dificulta el dejar de importar los energéticos rápidamente.
Hungría ha dicho que necesitaría por lo menos cinco años para dejar de importar petróleo de Moscú, debido a falta de infraestructura de almacenamiento y la reconfiguración de refinerías, las cuales están equipadas para procesar crudo ruso.
En la nueva propuesta, la Comisión Europea plantea dar más tiempo a ambos países para dejar paulatinamente la dependencia del petróleo ruso.
Con la nueva propuesta, Hungría y Eslovaquia podrán comprar petróleo ruso a través de oleoductos hasta finales del 2024, mientras que por otras vías lo podrán hacer hasta mediados de ese mismo año.
El resto de los países deberán de vetar las compras de petróleo ruso en los siguientes seis meses tras la aprobación del sexto paquete de sanciones. La UE espera dejar de importar totalmente crudo antes de que finalice el 2022.