La mezcla mexicana arrastra una pérdida mensual de 11.17%.
La mezcla mexicana de petróleo cerró la jornada con una pérdida de 2.15% o 2.05 dólares frente al precio de cierre del martes, al cotizarse en el mercado energético internacional en 93.08 dólares por barril, informó Petróleos Mexicanos (Pemex).
La mezcla mexicana de petróleo mantiene un promedio de 97.63 dólares por barril, 42.63 dólares por arriba de lo presupuestado por la Secretaría de Hacienda para 2022.
La mezcla mexicana cerró el mes de marzo con una ganancia de 6.75%, mientras que en abril cerró con una ganancia de 4.19%, en mayo con una utilidad de 11.58%, en junio cerró con una pérdida de 7.94% y en lo que va de julio arrastra una caída de 11.17%.
Los precios del petróleo cayeron cerca de un 2% hasta un mínimo de 12 semanas en un comercio volátil el miércoles, ampliando las fuertes pérdidas del martes, ya que los inversionistas están más preocupados de que la demanda de energía se vea afectada por una posible recesión mundial.
Los futuros del Brent para entrega en septiembre cayeron 2.08 dólares, o un 2.02, hasta los 100.69 dólares por barril. El crudo estadounidense West Texas Intermediate (WTI) bajó 97 centavos, o un 0.97%, a 98.53 dólares.
Ambos referenciales registraron sus cierres más bajos desde el 11 de abril, y en territorio de sobreventa técnica por segundo día consecutivo.
Las operaciones en la jornada fueron volátiles, con ambos contratos subiendo más de 2 dólares por barril por la preocupación sobre la oferta y perdiendo más de 4 dólares en sus mínimos de sesión. Los futuros del crudo han sido extremadamente volátiles durante meses.
El martes, el Brent se desplomó un 9% y el WTI se hundió un 8%. La caída de 10,73 dólares del Brent fue la tercera mayor del contrato desde que comenzó a negociarse en 1988. La mayor caída fue de 16,84 dólares en marzo.
Los futuros de la gasolina estadounidense también cayeron cerca de un 5%.
Los analistas del banco UBS citaron varias razones, entre ellas “el desmantelamiento del comercio de petróleo como cobertura contra la inflación, un dólar más fuerte, fondos de cobertura que reaccionan al impulso negativo del precio del petróleo, cobertura de productores y nuevas preocupaciones sobre restricciones de movilidad en China”.
Ante la previsión de que la Reserva Federal de Estados Unidos siga subiendo el costo del crédito, el interés abierto <CL-TOT> en los futuros del WTI cayó la semana pasada a su nivel más bajo desde mayo del 2016, ya que los inversores recortaron su inversión en activos de riesgo.
Los precios del petróleo también se vieron afectados por la subida del dólar, que alcanzó un máximo de casi 20 años frente a una cesta de otras divisas, lo que encareció el crudo para los compradores que utilizan esas otras monedas.
En China, el mayor importador de petróleo del mundo, el mercado se preocupó de que los nuevos confinamientos debido al COVID-19 pudieran reducir la demanda.
Presionando aún más los precios del petróleo, Equinor ASA dijo que se esperaba que todos los campos de petróleo y gas afectados por una huelga en el sector petrolero de Noruega volvieran a funcionar plenamente en un par de días.
(Reporte adicional de Rowena Edwards en Londres, Emily Chow en Kuala Lumpur y Arathy Somasekhar en Houston; editado en español por Ricardo Figueroa y Juana Casas)