Se esperan negociaciones intensas y difíciles decisiones antes de que se resuelva conflicto energético con EU y Canadá.
Especialistas nacionales e internacionales especializados en arbitrajes y litigios internacionales señalaron durante el panel “Arbitrajes y TMEC, lo que veremos en 2023” en la ‘Semana del Combustible 2022′, evento que forma parte del El Encuentro Internacional de Energía de México y organizado por Oil & Gas Magazine, un largo camino para la resolución de las diferencias entre Estados Unidos y Canadá con México en materia energética.
Fernando Rodríguez Cortina, socio de Arbitraje y Litigios Internacionales en King & Spalding, explicó que este viernes 19 de agosto podrían iniciar las mesas de consulta solicitadas por nuestros socios comerciales, debido a que ya se cumplió el plazo para el establecimiento del mecanismo de solución de controversias incluido en el TMEC.
“Se esperan negociaciones muy intensas durante las mesas de consulta, estos procesos duran 75 días, por lo que, en caso de que no se resuelva en esta instancia, el 3 de octubre, Estados Unidos y Canadá pueden pedir un panel internacional para resolver las controversias”, explicó.
El experto consideró que estas mesas podrían durar por lo menos 10 meses, por lo que el camino a la resolución es todavía muy largo.
Por su parte, Guillermo García, catedrático de la Texas A&M University, explicó que la experiencia internacional en este tipo de arbitrajes pueden llegar a tomar entre 8 y 10 años para solucionarse, además de involucrar altos costos económicos y políticos para las naciones involucradas.
Los expertos coinciden en que nuestro país tiene pocas probabilidades de salir bien librado de esta situación, ya que una vez que se resuelva el conflicto entre Estados, las empresas podrán iniciar sus propios arbitrajes internacionales contra el gobierno federal.
Ante esta situación, las empresas enfrentarán un gran dilema, explicó García Sánchez, porque las empresas deberán evaluar si iniciar un proceso largo para que se les pague las inversiones realizadas o bien esperar una resolución política a las trabas regulatorias.
Por ello, México se enfrentaría a un escenario donde las empresas extranjeras podrían quedarse en el país, pero no para invertir, sino para disminuir sus pérdidas, como dicta la experiencia internacional, como sucedió en Venezuela
“En caso de que las empresas se queden a negociar, los pilares de la nueva política energética se van a quedar para beneficiar a Pemex y CFE y eso, eventualmente, va a dejar el mercado más chico para los privados, y eso va a causar que inviertan con menos ganas, así como que dejen que se agoten las inversiones que tienen para después irse”.
Sobre el famoso capítulo 8 del TMEC, Claudio Rodríguez, socio en Holland & Knight, explicó que este no habla del sector eléctrico, lo cual forma parte de las consultas, además de que la constitución ya estipula que los hidrocarburos son de la nación.
“Al final del día, lo que se han vivido en los 3 últimos años, no está protegido por este placebo, porque efectivamente el artículo 27 constitucional aún reformado por la reforma energética del 2013 reserva los hidrocarburos a favor del estado. Entonces como bien dicen mis compañeros expertos en este panel, pues es un placebo, ya lo dice la constitución”.
Rodríguez explicó que dentro de la actual administración federal existe un dogmatismo que ha generado un evento histórico, como es la consulta Estado-Estado y como muestra es la respuesta que planea dar el presidente durante el 16 de septiembre.
“Lo que realmente preocupa, es que se atraviesa el 15 de septiembre porque habrá un posicionamiento del gobierno federal en materia energética, lo que puede establecer una línea de discusión en materia política. Ese día va a ser muy importante, porque puede que quieran ‘envolverse en una bandera de México y aventarse del Castillo de Chapultepec”.
Se esperan negociaciones intensas y difíciles decisiones antes de que se resuelva conflicto energético con EU y Canadá.
Especialistas nacionales e internacionales especializados en arbitrajes y litigios internacionales señalaron durante el panel “Arbitrajes y TMEC, lo que veremos en 2023” en la ‘Semana del Combustible 2022′, evento que forma parte del El Encuentro Internacional de Energía de México y organizado por Oil & Gas Magazine, un largo camino para la resolución de las diferencias entre Estados Unidos y Canadá con México en materia energética.
Fernando Rodríguez Cortina, socio de Arbitraje y Litigios Internacionales en King & Spalding, explicó que este viernes 19 de agosto podrían iniciar las mesas de consulta solicitadas por nuestros socios comerciales, debido a que ya se cumplió el plazo para el establecimiento del mecanismo de solución de controversias incluido en el TMEC.
“Se esperan negociaciones muy intensas durante las mesas de consulta, estos procesos duran 75 días, por lo que, en caso de que no se resuelva en esta instancia, el 3 de octubre, Estados Unidos y Canadá pueden pedir un panel internacional para resolver las controversias”, explicó.
El experto consideró que estas mesas podrían durar por lo menos 10 meses, por lo que el camino a la resolución es todavía muy largo.
Por su parte, Guillermo García, catedrático de la Texas A&M University, explicó que la experiencia internacional en este tipo de arbitrajes pueden llegar a tomar entre 8 y 10 años para solucionarse, además de involucrar altos costos económicos y políticos para las naciones involucradas.
Los expertos coinciden en que nuestro país tiene pocas probabilidades de salir bien librado de esta situación, ya que una vez que se resuelva el conflicto entre Estados, las empresas podrán iniciar sus propios arbitrajes internacionales contra el gobierno federal.
Ante esta situación, las empresas enfrentarán un gran dilema, explicó García Sánchez, porque las empresas deberán evaluar si iniciar un proceso largo para que se les pague las inversiones realizadas o bien esperar una resolución política a las trabas regulatorias.
Por ello, México se enfrentaría a un escenario donde las empresas extranjeras podrían quedarse en el país, pero no para invertir, sino para disminuir sus pérdidas, como dicta la experiencia internacional, como sucedió en Venezuela
“En caso de que las empresas se queden a negociar, los pilares de la nueva política energética se van a quedar para beneficiar a Pemex y CFE y eso, eventualmente, va a dejar el mercado más chico para los privados, y eso va a causar que inviertan con menos ganas, así como que dejen que se agoten las inversiones que tienen para después irse”.
Sobre el famoso capítulo 8 del TMEC, Claudio Rodríguez, socio en Holland & Knight, explicó que este no habla del sector eléctrico, lo cual forma parte de las consultas, además de que la constitución ya estipula que los hidrocarburos son de la nación.
“Al final del día, lo que se han vivido en los 3 últimos años, no está protegido por este placebo, porque efectivamente el artículo 27 constitucional aún reformado por la reforma energética del 2013 reserva los hidrocarburos a favor del estado. Entonces como bien dicen mis compañeros expertos en este panel, pues es un placebo, ya lo dice la constitución”.
Rodríguez explicó que dentro de la actual administración federal existe un dogmatismo que ha generado un evento histórico, como es la consulta Estado-Estado y como muestra es la respuesta que planea dar el presidente durante el 16 de septiembre.
“Lo que realmente preocupa, es que se atraviesa el 15 de septiembre porque habrá un posicionamiento del gobierno federal en materia energética, lo que puede establecer una línea de discusión en materia política. Ese día va a ser muy importante, porque puede que quieran ‘envolverse en una bandera de México y aventarse del Castillo de Chapultepec”.