La Casa Blanca analiza la posibilidad de prohibir la exportación de gasolina, para reducir los precios de la gasolina.
Los funcionarios de la Casa Blanca le han pedido al Departamento de Energía de los Estados Unidos que analice los posibles impactos de una prohibición a las exportaciones de gasolina, diésel y otros productos refinados del petróleo, como medida para compensar los recortes a la producción de la OPEP+.
El Departamento de Energía está brindando información sobre la economía en juego y evaluando todas las herramientas sobre la mesa, pero no en respuesta a una solicitud formal o informal de un estudio, de acuerdo con reporte de Bloomberg.
Ante una eventual prohibición de exportación, los productores de petróleo y los analistas han criticado la propuesta, diciendo que podría resultar contraproducente al aumentar aún más los costos para los consumidores estadounidenses, al tiempo que perturba los mercados y corta a los aliados europeos en su momento de necesidad.
El presidente pidió hoy otra vez a las compañías de energía que sigan bajando los precios de las gasolineras cerrando la brecha históricamente grande entre los precios de la gasolina al por mayor y al por menor, para que los consumidores estadounidenses paguen menos en las estaciones de servicio.
“A la luz de la acción de hoy, la Administración Biden también consultará con el Congreso sobre herramientas y autoridades adicionales para reducir el control de la OPEP sobre los precios de la energía”, informó en un comunicado.
Incluso antes de la acción del miércoles de la OPEP+ para reducir la producción de petróleo, los precios del gas en los Estados Unidos estaban subiendo y es probable que se avecinen más aumentos en las estaciones de servicio.
Los precios de la gasolina subieron casi 3 centavos por galón en la lectura diaria de AAA el miércoles, a 3.83 por galón, el mayor aumento de un día en casi cuatro meses.
El aumento en los precios de la gasolina pone en aprietos a los candidatos demócratas de cara a las elecciones intermedias en noviembre, de ahí la urgencia de la administración Biden de reducir los precios de los combustibles antes de las elecciones.
La Casa Blanca analiza la posibilidad de prohibir la exportación de gasolina, para reducir los precios de la gasolina.
Los funcionarios de la Casa Blanca le han pedido al Departamento de Energía de los Estados Unidos que analice los posibles impactos de una prohibición a las exportaciones de gasolina, diésel y otros productos refinados del petróleo, como medida para compensar los recortes a la producción de la OPEP+.
El Departamento de Energía está brindando información sobre la economía en juego y evaluando todas las herramientas sobre la mesa, pero no en respuesta a una solicitud formal o informal de un estudio, de acuerdo con reporte de Bloomberg.
Ante una eventual prohibición de exportación, los productores de petróleo y los analistas han criticado la propuesta, diciendo que podría resultar contraproducente al aumentar aún más los costos para los consumidores estadounidenses, al tiempo que perturba los mercados y corta a los aliados europeos en su momento de necesidad.
El presidente pidió hoy otra vez a las compañías de energía que sigan bajando los precios de las gasolineras cerrando la brecha históricamente grande entre los precios de la gasolina al por mayor y al por menor, para que los consumidores estadounidenses paguen menos en las estaciones de servicio.
“A la luz de la acción de hoy, la Administración Biden también consultará con el Congreso sobre herramientas y autoridades adicionales para reducir el control de la OPEP sobre los precios de la energía”, informó en un comunicado.
Incluso antes de la acción del miércoles de la OPEP+ para reducir la producción de petróleo, los precios del gas en los Estados Unidos estaban subiendo y es probable que se avecinen más aumentos en las estaciones de servicio.
Los precios de la gasolina subieron casi 3 centavos por galón en la lectura diaria de AAA el miércoles, a 3.83 por galón, el mayor aumento de un día en casi cuatro meses.
El aumento en los precios de la gasolina pone en aprietos a los candidatos demócratas de cara a las elecciones intermedias en noviembre, de ahí la urgencia de la administración Biden de reducir los precios de los combustibles antes de las elecciones.