Estados Unidos busca reactivar las licitaciones tras ser frenadas por la administración Biden.
En un intento por cumplir con las disposiciones estipuladas en un proyecto de ley de energía firmado recientemente, la Oficina de Administración de Energía Oceánica (BOEM, por sus siglas en inglés) de los Estados Unidos ha tomado medidas para realizar la próxima licitación de bloques de petróleo y gas en el Golfo de México.
Este anuncio se produce después de que BOEM restableciera en septiembre de 2022 la primera venta de arrendamiento de petróleo y gas realizada bajo la administración de Biden por acres en aguas federales en el Golfo de México, que fue invalidada por un juez en enero de 2022 por no contabilizar adecuadamente por el impacto del cambio climático de la venta del arrendamiento.
Estas acciones se llevaron a cabo para cumplir con la Ley de Reducción de la Inflación (IRA, por sus siglas en inglés) de 2022, que el presidente Joe Biden promulgó en agosto de 2022. Este proyecto de ley de energía, que se espera que abra la puerta a más ventas federales de arrendamiento en tierra y en alta mar, describió que restablecería la Venta de Arrendamiento 257 del Golfo de México desocupada y mantendría las Ventas de Arrendamiento canceladas 258, 259 y 261.
De acuerdo con esto, BOEM reveló el jueves los próximos pasos para el arrendamiento de petróleo y gas en la plataforma continental exterior, incluida una venta propuesta para la región del Golfo de México y la finalización de una revisión ambiental para Cook Inlet, en el mar de Alaska.
Además, la agencia gubernamental publicó en su sitio web un aviso de venta propuesto para la licitación 259 en el Golfo de México.
Además, se publicó en el sitio web de BOEM una declaración final de impacto ambiental que analiza los impactos potenciales de la licitación 258, que el Congreso ordenó a BOEM que realizara para fin de año, mientras que un aviso de la disponibilidad Se espera que se publique en el Registro Federal en los próximos días.
También identifica la alternativa preferida, que ofrecería en arrendamiento 193 bloques no arrendados, aproximadamente 387 mil 771 hectáreas, y difiere los 17 bloques que se superponen total o parcialmente con los hábitats críticos de la ballena beluga y la nutria marina del norte.