La CNH aprobó ayer la modificación del plan de desarrollo del campo de gas en aguas profundas Lakach.
La Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) aprobó el plan renovado para desarrollar el proyecto de gas natural en aguas profundas Lakach, presentado por la petrolera estatal Pemex, en la primera sesión pública presidida por su nuevo titular.
El campo en el Golfo de México tiene hasta 937 mil millones de pies cúbicos de reservas. El aumento de los costos ha obstaculizado el desarrollo, pero el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que podría ser clave para suministrar el gas que tanto necesita el país.
Funcionarios de la CNH, como se conoce al ente regulador, plantearon dudas durante la sesión sobre si Pemex podría hacerse cargo del proyecto, que fue abandonado en el pasado.
Durante la presidencia de López Obrador (2018-2024), Pemex propuso revivir el proyecto junto con la compañía estadounidense New Fortress Energy.
“Se trata de una gran inversión pero también se trata de una gran incertidumbre”, dijo Alma Porres, comisionada de la CNH. “Es muy importante que se dé seguimiento muy estricto (al proyecto) mucho más que a los demás”, agregó.
Pemex no tiene mucha experiencia en emprendimientos en aguas profundas. Su proyecto emblemático de petróleo en aguas ultraprofundas Trion, que está desarrollando junto con Woodside Energy, aún está pendiente de la decisión final de inversión.
Todos los funcionarios de la CNH dieron luz verde a Lakach, luego de que Pemex modificara su plan original. Inicialmente estimado en mil 500 millones de dólares, el regulador aprobó el nuevo plan en mil 790 millones de dólares.
Ni Pemex ni el Gobierno comentaron sobre la decisión.
Las leyes mexicanas estipulan que la aprobación regulatoria requiere que los proyectos sean técnica y económicamente viables.
Fuentes dijeron a Reuters el mes pasado que el destino de Lakach podría depender del reemplazo del jefe del regulador, Rogelio Hernández. Hernández renunció abruptamente en septiembre, mucho antes de que expirara su mandato en 2026.
López Obrador nombró recientemente a un exfuncionario de Pemex, Agustín Díaz, para encabezar el regulador.
Díaz aseguró el lunes que estaba optimista sobre el desarrollo. “Es fundamental para la producción de gas”, sostuvo. “Cada vez tenemos que orientarnos más hacia el desarrollo tecnológico en aguas profundas”, agregó.
Pemex había propuesto desarrollar Lakach con New Fortress Energy mediante un contrato de servicios, una fórmula utilizada antes de la apertura del sector energético del país entre 2013 y 2014.
Bajo un contrato de servicios, Pemex retendría la propiedad total pero asumiría el riesgo si los precios caen. El regulador no abordó los detalles del contrato con New Fortress Energy en su sesión.
(Reporte de Stefanie Eschenbacher; Reporte adicional de Marianna Párraga y Ana Isabel Martínez; Editado por Diego Oré)