El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha acusado a un líder neonazi y a su socia de conspirar para atacar la red eléctrica de Baltimore, un plan que el FBI desbarató con la ayuda de un informante confidencial.
Brandon Russell y Sarah Clendaniel, fueron detenidos la semana pasada, informaron las autoridades el lunes, y han sido acusados de conspirar para dañar una instalación energética.
Russell es un delincuente convicto y fundador de un grupo neonazi llamado Atomwaffen Division que trabaja para “provocar el colapso de la civilización”, según el Southern Poverty Law Center, una organización de derechos civiles que rastrea los grupos de odio en Estados Unidos.
Russell fue condenado anteriormente a cinco años de prisión tras declararse culpable de posesión de un artefacto de destrucción no registrado y de almacenamiento inadecuado de materiales explosivos.
En el momento de su detención seguía en libertad supervisada, según el FBI.
El FBI alegó el lunes que el complot tenía una motivación racial, pero no dio más detalles. Alrededor del 62% de los residentes de la ciudad de Baltimore son negros, según datos del censo estadounidense.
Los representantes de Clendaniel y Russell no pudieron ser contactados inmediatamente para hacer comentarios.
“Clendaniel y Russell conspiraron y tomaron medidas para atacar múltiples subestaciones eléctricas en el área de Baltimore con el objetivo de ‘destruir completamente toda esta ciudad’, pero estos planes fueron detenidos”, dijo Erek Barron, fiscal federal del distrito de Maryland, en la rueda de prensa.
Baltimore Gas and Electric, filial de Exelon Corporation , propietaria de las subestaciones atacadas, declaró que no se habían producido daños en ninguno de sus equipos ni cortes de suministro.
Las detenciones se produjeron tras los recientes actos de vandalismo frente subestaciones eléctricas que dejaron sin electricidad a miles de personas en otros estados del país, como Carolina del Norte, Carolina del Sur y Washington.
Se desconocen los motivos de esos ataques.
Thomas Sobocinski, agente especial a cargo de la oficina del FBI en Baltimore, dijo que el FBI no tenía conocimiento de ningún vínculo entre las dos personas detenidas en el presunto complot de Baltimore y los ataques en otros lugares contra la infraestructura eléctrica.
(Reporte de Kanishka Singh; Editado en español por Aida Peláez-Fernández)