Polonia ha logrado dejar de depender del petróleo ruso tras la invasión de Ucrania.
Polonia reducirá sus importaciones de petróleo ruso hasta cerca de cero en febrero-marzo, dijo el martes el primer ministro Mateusz Morawiecki, mientras Varsovia sigue rebajando su dependencia de Rusia debido a la guerra en Ucrania.
El pasado marzo, Polonia se comprometió a dejar de utilizar crudo ruso para finales de 2022. En aquel momento, la polaca PKN Orlen tenía un contrato a largo plazo con Rosneft que expiraba a fines de 2022 y un acuerdo con Tatneft hasta 2024.
“A principios de este año, las importaciones procedentes de Rusia disminuyeron hasta el 10% (…) y en febrero-marzo, según la información que me llega de Orlen, serán del 0%, es decir, una cifra cercana a cero”, declaró Morawiecki.
El sábado, la empresa polaca PKN Orlen declaró que Rusia había interrumpido el suministro de petróleo a Polonia a través del oleoducto de Druzhba, pero afirmó que recurriría a otras fuentes para tapar el agujero.
(Reporte de Anna Koper, Pawel Florkiewicz y Marek Strzelecki; editado en español por Carlos Serrano)
Polonia ha logrado dejar de depender del petróleo ruso tras la invasión de Ucrania.
Polonia reducirá sus importaciones de petróleo ruso hasta cerca de cero en febrero-marzo, dijo el martes el primer ministro Mateusz Morawiecki, mientras Varsovia sigue rebajando su dependencia de Rusia debido a la guerra en Ucrania.
El pasado marzo, Polonia se comprometió a dejar de utilizar crudo ruso para finales de 2022. En aquel momento, la polaca PKN Orlen tenía un contrato a largo plazo con Rosneft que expiraba a fines de 2022 y un acuerdo con Tatneft hasta 2024.
“A principios de este año, las importaciones procedentes de Rusia disminuyeron hasta el 10% (…) y en febrero-marzo, según la información que me llega de Orlen, serán del 0%, es decir, una cifra cercana a cero”, declaró Morawiecki.
El sábado, la empresa polaca PKN Orlen declaró que Rusia había interrumpido el suministro de petróleo a Polonia a través del oleoducto de Druzhba, pero afirmó que recurriría a otras fuentes para tapar el agujero.
(Reporte de Anna Koper, Pawel Florkiewicz y Marek Strzelecki; editado en español por Carlos Serrano)