Light se convierte a la empresa eléctrica en la más reciente de las grandes de Brasil en solicitar la protección frente a sus acreedores.
Light se declaró el viernes en quiebra con una deuda de unos 11 mil millones de reales (2 mil 200 millones de dólares), lo que convierte a la empresa eléctrica en la más reciente de las grandes de Brasil en solicitar la protección frente a sus acreedores.
Light, que distribuye electricidad en el estado de Río de Janeiro, se suma al gigante minorista Americanas SA , a la empresa de telecomunicaciones Oi SA y a la cervecera Petropolis, que se han declarado en quiebra este año en medio de una crisis financiera.
Light dijo en un comunicado al regulador de valores que la solicitud ante un tribunal de Río de Janeiro se debe a que las condiciones económicas y financieras de la empresa y de algunas de sus filiales siguieron empeorando, a pesar de los esfuerzos por cumplir sus obligaciones.
Requirió “la adopción urgente de otras medidas que puedan protegerlas hasta que sea posible implementar un ajuste de su endeudamiento y un ajuste de su estructura de capital”, dijo Light.
Las acciones de la empresa, cuyo mayor accionista es el fondo de inversión Samambaia FIA, de Ronaldo Cezar Coelho, caían más de un 17%, hasta 3,85 reales, en las operaciones de la mañana tras conocerse la noticia.
La eléctrica ya había solicitado a principios de año a un tribunal que suspendiera temporalmente el pago de sus deudas financieras.
A principios de esta semana, el ministro brasileño de Minas y Energía, Alexandre Silveira, criticó a Light, diciendo que las empresas con “ninguna eficiencia de gestión (…) como Light”, no deberían obtener la renovación de sus contratos de distribución. Light no quiso entonces hacer comentarios.
Reuters. (1 dólar = 5,0033 reales) (Reporte de Gabriel Araujo; reporte adicional de Leticia Fucuchima y Rodrigo Viga Gaier Editado en español por Javier López de Lérida)