Una de las soluciones de México fue apostar por su industria petrolera, que terminó siendo un éxito para cuando se presentó el conflicto entre Rusia y Ucrania.
A pesar de los amplios avances tecnológicos y el desarrollo de nuevos modos de energía, el mundo sigue teniendo como principal fuente al llamado oro negro: el petróleo. Su importancia es tan grande en la actualidad que ha hecho que economías completas de diferentes países ronden en torno al precio del mismo, pudiendo esto convertirse en una buena o mala señal según esté el precio del crudo en el mercado.
México no es la excepción en este caso: recientemente, a pesar de ser un país que exporta autos, autopartes y celulares o laptops (desde donde bien se puede jugar diferentes videojuegos o los mejores juegos de blackjack), ha visto cómo sus exportaciones han aumentado para bien gracias a dicho mineral.
Sin embargo, una duda surge en torno a la industria petrolera en México: ¿cómo ha logrado dicho sector impulsar el crecimiento de un país recientemente cuando no lo lograba en el pasado? En este artículo te daremos la respuesta y muchas otras.
Una economía de guerra que facilita el crecimiento de la industria
Los últimos años han sido un revuelo dentro del entorno económico de diferentes países, haciendo que el entorno mundial se haya sacudido de diferentes maneras. Varias empresas se vieron en la necesidad de cerrar por falta de producción e insumos, y para cuando las actividades comerciales fueron reanudadas, hubo que enfrentarse al aumento de los tipos de interés en Estados Unidos.
Si bien esta situación logró que muchos países latinoamericanos se tambalearan, también fue el desencadenante para que pusieran a prueba diferentes tipos de inversiones para estabilizarse. Una de las soluciones de México fue apostar por su industria petrolera, que terminó siendo un éxito para cuando se presentó el conflicto entre Rusia y Ucrania.
Con un crecimiento en la demanda de petróleo dado a los bloqueos económicos a Rusia, se abrió paso a países más pequeños para dar cabida a este tipo de economía. De hecho, las exportaciones petroleras de México para el 2022 subieron un 81.3% representando 3,825 millones de dólares.
¿Qué impedía el crecimiento anteriormente?
Si bien este nuevo tipo de ingreso por medio de la industria petrolera es muy bien recibido, no parece ser algo que vaya a durar mucho. El precio del petróleo actualmente se encuentra en lo más alto, cosa que permite una exportación eficiente en donde el país se ve mermado de ganancia.
Sin embargo, la nación no posee una inversión muy sólida dentro del área y la falta de capital en dicho sector simboliza una burbuja que puede estallar en cualquier momento. Si el precio del petróleo empieza a menguar, también lo harán los ingresos por este medio, por lo cual es necesario la inversión por parte de los gobernantes.
¿Cuál es la solución para mantener esta economía?
La más obvia es que los gobernantes del país aprovechen la época de bonanza y la utilicen para cimentar las bases de una industria que será muy provechosa en un futuro. México posee cercanía con uno de los mayores consumidores de petróleo del mundo (Estados Unidos) y una facilidad de venta dado a la gran cantidad de tratados.
Si se realiza una inversión sustancial, la industria terminaría convirtiéndose en un gran éxito que bien podría impulsar al país de una manera gigantesca.
Una de las soluciones de México fue apostar por su industria petrolera, que terminó siendo un éxito para cuando se presentó el conflicto entre Rusia y Ucrania.
A pesar de los amplios avances tecnológicos y el desarrollo de nuevos modos de energía, el mundo sigue teniendo como principal fuente al llamado oro negro: el petróleo. Su importancia es tan grande en la actualidad que ha hecho que economías completas de diferentes países ronden en torno al precio del mismo, pudiendo esto convertirse en una buena o mala señal según esté el precio del crudo en el mercado.
México no es la excepción en este caso: recientemente, a pesar de ser un país que exporta autos, autopartes y celulares o laptops (desde donde bien se puede jugar diferentes videojuegos o los mejores juegos de blackjack), ha visto cómo sus exportaciones han aumentado para bien gracias a dicho mineral.
Sin embargo, una duda surge en torno a la industria petrolera en México: ¿cómo ha logrado dicho sector impulsar el crecimiento de un país recientemente cuando no lo lograba en el pasado? En este artículo te daremos la respuesta y muchas otras.
Una economía de guerra que facilita el crecimiento de la industria
Los últimos años han sido un revuelo dentro del entorno económico de diferentes países, haciendo que el entorno mundial se haya sacudido de diferentes maneras. Varias empresas se vieron en la necesidad de cerrar por falta de producción e insumos, y para cuando las actividades comerciales fueron reanudadas, hubo que enfrentarse al aumento de los tipos de interés en Estados Unidos.
Si bien esta situación logró que muchos países latinoamericanos se tambalearan, también fue el desencadenante para que pusieran a prueba diferentes tipos de inversiones para estabilizarse. Una de las soluciones de México fue apostar por su industria petrolera, que terminó siendo un éxito para cuando se presentó el conflicto entre Rusia y Ucrania.
Con un crecimiento en la demanda de petróleo dado a los bloqueos económicos a Rusia, se abrió paso a países más pequeños para dar cabida a este tipo de economía. De hecho, las exportaciones petroleras de México para el 2022 subieron un 81.3% representando 3,825 millones de dólares.
¿Qué impedía el crecimiento anteriormente?
Si bien este nuevo tipo de ingreso por medio de la industria petrolera es muy bien recibido, no parece ser algo que vaya a durar mucho. El precio del petróleo actualmente se encuentra en lo más alto, cosa que permite una exportación eficiente en donde el país se ve mermado de ganancia.
Sin embargo, la nación no posee una inversión muy sólida dentro del área y la falta de capital en dicho sector simboliza una burbuja que puede estallar en cualquier momento. Si el precio del petróleo empieza a menguar, también lo harán los ingresos por este medio, por lo cual es necesario la inversión por parte de los gobernantes.
¿Cuál es la solución para mantener esta economía?
La más obvia es que los gobernantes del país aprovechen la época de bonanza y la utilicen para cimentar las bases de una industria que será muy provechosa en un futuro. México posee cercanía con uno de los mayores consumidores de petróleo del mundo (Estados Unidos) y una facilidad de venta dado a la gran cantidad de tratados.
Si se realiza una inversión sustancial, la industria terminaría convirtiéndose en un gran éxito que bien podría impulsar al país de una manera gigantesca.