La industria petroquímica mexicana enfrenta una crisis por la escasez de etano, afectando la producción de plásticos. Nuevas perforaciones podrían aliviar la situación.
La industria petroquímica mexicana enfrenta una crisis significativa debido a la escasez de etano, un elemento crucial para producir diversos productos petroquímicos y plásticos.
Esta situación se agrava por la reducción en la producción de petróleo y la disponibilidad de gas húmedo asociado. Además, la contaminación por nitrógeno en el gas natural de la Zona Marina Noreste y la Zona Sur ha incrementado la quema e inyección de gas en los yacimientos, uno de los puntos que más preocupación ha causado a los inversionistas de Petróleos Mexicanos (Pemex).
Este gas, con altos niveles de nitrógeno, no es adecuado para ser procesado en los Centros de Procesamiento de Gas del Sureste (Ciudad Pemex, Nuevo Pemex y Cactus), lo que afecta la eficiencia de las plantas criogénicas y la capacidad de recuperación de etano.
En las próximas semanas, comenzarán perforaciones profundas en la zona de La Venta, en los pozos Kabi-1 y Alacte-1, así como en los campos maduros de la región poniente de Tabasco. Estas perforaciones prometen incrementar la producción de etano y se abre una ventana de esperanza para la producción de petroquímicos en nuestro país.
El Complejo Procesador de Gas La Venta, con sus plantas criogénicas, podría aumentar significativamente la producción de este hidrocarburo vital, permitiendo a Pemex cumplir con los compromisos de suministro.
La reactivación de la industria petroquímica no solo es esencial para la producción de plásticos, sino que también generará más ingresos para la paraestatal y creará nuevos empleos en el sureste veracruzano, especialmente en las instalaciones del activo Cinco Presidentes.
La industria petroquímica mexicana enfrenta una crisis por la escasez de etano, afectando la producción de plásticos. Nuevas perforaciones podrían aliviar la situación.
La industria petroquímica mexicana enfrenta una crisis significativa debido a la escasez de etano, un elemento crucial para producir diversos productos petroquímicos y plásticos.
Esta situación se agrava por la reducción en la producción de petróleo y la disponibilidad de gas húmedo asociado. Además, la contaminación por nitrógeno en el gas natural de la Zona Marina Noreste y la Zona Sur ha incrementado la quema e inyección de gas en los yacimientos, uno de los puntos que más preocupación ha causado a los inversionistas de Petróleos Mexicanos (Pemex).
Este gas, con altos niveles de nitrógeno, no es adecuado para ser procesado en los Centros de Procesamiento de Gas del Sureste (Ciudad Pemex, Nuevo Pemex y Cactus), lo que afecta la eficiencia de las plantas criogénicas y la capacidad de recuperación de etano.
En las próximas semanas, comenzarán perforaciones profundas en la zona de La Venta, en los pozos Kabi-1 y Alacte-1, así como en los campos maduros de la región poniente de Tabasco. Estas perforaciones prometen incrementar la producción de etano y se abre una ventana de esperanza para la producción de petroquímicos en nuestro país.
El Complejo Procesador de Gas La Venta, con sus plantas criogénicas, podría aumentar significativamente la producción de este hidrocarburo vital, permitiendo a Pemex cumplir con los compromisos de suministro.
La reactivación de la industria petroquímica no solo es esencial para la producción de plásticos, sino que también generará más ingresos para la paraestatal y creará nuevos empleos en el sureste veracruzano, especialmente en las instalaciones del activo Cinco Presidentes.