Equinor y Eidesvik Offshore convertirán el buque Viking Energy para operar con amoníaco, reduciendo emisiones en un 70% y liderando la innovación en energía marítima.
Equinor ha firmado un contrato con Eidesvik Offshore para la conversión del buque de suministro de Viking Energy para que opere con amoníaco. El buque se convertirá por completo y se pondrá en funcionamiento con bajas emisiones en 2026.
El buque abastece a las instalaciones de Equinor en la plataforma continental noruega (NCS).
Viking Energy será el primer buque de suministro del mundo propulsado por amoníaco. Wärtsilä construirá el motor en nombre de Eidesvik Offshore.
“Tenemos la ambición de reducir a la mitad las emisiones marítimas asociadas con nuestras operaciones en Noruega para 2030. Con este contrato, en colaboración con Eidesvik Offshore, emplearemos una nueva tecnología de bajas emisiones. Creemos firmemente en el uso de amoníaco como combustible en nuestros buques de suministro”, afirma Ørjan Kvelvane, vicepresidente sénior de Equinor para el apoyo a operaciones conjuntas.
La conversión del buque a la operación con amoníaco por parte de Eidesvik Offshore y Wärtsilä reducirá las emisiones de Viking Energy en al menos un 70 por ciento. Equinor y Eidesvik Offshore tienen una historia de 21 años de colaboración en tecnología ambiental en Viking Energy.
En el momento de su entrega en 2003, el buque fue el primer buque de suministro propulsado por GNL del mundo. También fue el primero del mundo en recibir la designación «Battery Power» de DNV.
Además de utilizar el buque en sus operaciones, Equinor contribuirá de forma significativa a la financiación de la conversión al funcionamiento con amoníaco. El proyecto recibe una ayuda de cinco millones de euros a través del programa Horizonte Europa de la UE. La conversión necesaria y la instalación del nuevo motor junto con el sistema completo de suministro de gas combustible y el postratamiento de los gases de escape de Wärtsilä se llevarán a cabo en 2026.
“La flota de alta mar del NCS está envejeciendo y necesita renovarse. Invertir en nuevas tecnologías es costoso y hay muchas incertidumbres. Al mismo tiempo, es urgente ampliar el uso de la tecnología operativa para permitir la transformación necesaria. La cooperación con las autoridades y los proveedores competentes para la introducción progresiva de la tecnología más reciente es esencial para alcanzar los objetivos de emisiones que nos hemos fijado”, afirma Kvelvane.
El gobierno ha anunciado que establecerá requisitos para soluciones de bajas emisiones a partir de 2025 y emisiones cero para los nuevos buques de suministro a partir de 2029. La orientación de estos requisitos aún no se ha decidido. Además de este contrato, Equinor también ha realizado una investigación en el mercado para buques de suministro capaces de funcionar con amoniaco.