Ecuador experimentará apagones nacionales de ocho horas debido a una grave sequía que afecta sus hidroeléctricas, junto con medidas de seguridad para evitar desmanes.
Ecuador se prepara para enfrentar una serie de apagones nacionales de ocho horas, programados para la próxima semana, debido a una severa sequía que ha afectado el funcionamiento de sus principales centrales hidroeléctricas. El Gobierno anunció que los apagones se realizarán entre las 22:00 y las 6:00 horas durante el lunes, martes, miércoles y jueves. Esta situación ha generado una escasez de electricidad que no permite satisfacer la demanda interna del país.
El presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, ha atribuido estos cortes al impacto de la sequía, que ha reducido la capacidad de las hidroeléctricas para generar electricidad. Este será el tercer periodo de apagones que enfrenta el país en menos de un año, tras los experimentados a finales de 2023 y en abril de 2024.
El Gobierno también ha implementado medidas de seguridad para estos apagones. La ministra del Interior, Mónica Palencia, anunció la intención de establecer un toque de queda para prevenir desmanes durante la suspensión del servicio eléctrico. Además, las Fuerzas Armadas tomarán control del embalse de Mazar para evitar sabotajes en esta infraestructura clave para el suministro de electricidad.
Para minimizar el impacto económico y social, el Gobierno ha dispuesto que el sector público realice teletrabajo el jueves y viernes de las próximas dos semanas. Se estima que cada hora de racionamiento eléctrico provoca pérdidas de 12 millones de dólares.
El presidente Noboa continúa trabajando en estrategias para enfrentar el conflicto armado interno y las complicaciones que esto genera, junto con la crisis energética que afecta a Ecuador.
Ecuador experimentará apagones nacionales de ocho horas debido a una grave sequía que afecta sus hidroeléctricas, junto con medidas de seguridad para evitar desmanes.
Ecuador se prepara para enfrentar una serie de apagones nacionales de ocho horas, programados para la próxima semana, debido a una severa sequía que ha afectado el funcionamiento de sus principales centrales hidroeléctricas. El Gobierno anunció que los apagones se realizarán entre las 22:00 y las 6:00 horas durante el lunes, martes, miércoles y jueves. Esta situación ha generado una escasez de electricidad que no permite satisfacer la demanda interna del país.
El presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, ha atribuido estos cortes al impacto de la sequía, que ha reducido la capacidad de las hidroeléctricas para generar electricidad. Este será el tercer periodo de apagones que enfrenta el país en menos de un año, tras los experimentados a finales de 2023 y en abril de 2024.
El Gobierno también ha implementado medidas de seguridad para estos apagones. La ministra del Interior, Mónica Palencia, anunció la intención de establecer un toque de queda para prevenir desmanes durante la suspensión del servicio eléctrico. Además, las Fuerzas Armadas tomarán control del embalse de Mazar para evitar sabotajes en esta infraestructura clave para el suministro de electricidad.
Para minimizar el impacto económico y social, el Gobierno ha dispuesto que el sector público realice teletrabajo el jueves y viernes de las próximas dos semanas. Se estima que cada hora de racionamiento eléctrico provoca pérdidas de 12 millones de dólares.
El presidente Noboa continúa trabajando en estrategias para enfrentar el conflicto armado interno y las complicaciones que esto genera, junto con la crisis energética que afecta a Ecuador.