Pemex coordina con Hacienda un financiamiento respaldado por bancos para saldar deudas con proveedores, mientras enfrenta una deuda histórica y busca apoyo estatal adicional.
La Secretaría de Hacienda y Petróleos Mexicanos (Pemex) trabajan en conjunto para estructurar un plan de financiamiento que permitirá a la petrolera estatal cubrir deudas con sus proveedores, que ascienden a más de 20 mil millones de dólares.
Este plan, anunciado por el director general de Pemex, Víctor Rodríguez, durante un evento privado organizado por el Colegio de Ingenieros Petroleros de México, incluirá la participación de un consorcio de bancos.
Rodríguez explicó que Hacienda asumiría parte de la deuda en nombre de Pemex, debido a las limitaciones de la empresa para incrementar su propio techo de deuda sin incurrir en costos elevados.
Este esquema se sumará al apoyo presupuestario ya asignado para 2025, que incluye una transferencia estatal de 6 mil 700 millones de dólares destinada a cubrir pagos de deuda.
Además de los vencimientos de deuda financiera, que alcanzarán un pico de 13 mil millones en 2026, Pemex enfrenta una crisis de liquidez que ha llevado a retrasos significativos en los pagos a contratistas.
En años anteriores, bancos como Citigroup y Deutsche Bank han facilitado financiamiento a Pemex bajo condiciones que incluyen garantías contra incumplimientos, como swaps de incumplimiento crediticio emitidos por grandes proveedores como SLB.
El plan busca aliviar la presión financiera de Pemex mientras la administración de Claudia Sheinbaum refuerza el respaldo estatal a la compañía. Sin embargo, el reto de priorizar pagos y gestionar adecuadamente los fondos será crucial para evitar un colapso en la cadena de suministros y mantener la operación de los proyectos estratégicos.
Pemex coordina con Hacienda un financiamiento respaldado por bancos para saldar deudas con proveedores, mientras enfrenta una deuda histórica y busca apoyo estatal adicional.
La Secretaría de Hacienda y Petróleos Mexicanos (Pemex) trabajan en conjunto para estructurar un plan de financiamiento que permitirá a la petrolera estatal cubrir deudas con sus proveedores, que ascienden a más de 20 mil millones de dólares.
Este plan, anunciado por el director general de Pemex, Víctor Rodríguez, durante un evento privado organizado por el Colegio de Ingenieros Petroleros de México, incluirá la participación de un consorcio de bancos.
Rodríguez explicó que Hacienda asumiría parte de la deuda en nombre de Pemex, debido a las limitaciones de la empresa para incrementar su propio techo de deuda sin incurrir en costos elevados.
Este esquema se sumará al apoyo presupuestario ya asignado para 2025, que incluye una transferencia estatal de 6 mil 700 millones de dólares destinada a cubrir pagos de deuda.
Además de los vencimientos de deuda financiera, que alcanzarán un pico de 13 mil millones en 2026, Pemex enfrenta una crisis de liquidez que ha llevado a retrasos significativos en los pagos a contratistas.
En años anteriores, bancos como Citigroup y Deutsche Bank han facilitado financiamiento a Pemex bajo condiciones que incluyen garantías contra incumplimientos, como swaps de incumplimiento crediticio emitidos por grandes proveedores como SLB.
El plan busca aliviar la presión financiera de Pemex mientras la administración de Claudia Sheinbaum refuerza el respaldo estatal a la compañía. Sin embargo, el reto de priorizar pagos y gestionar adecuadamente los fondos será crucial para evitar un colapso en la cadena de suministros y mantener la operación de los proyectos estratégicos.