El primer ministro francés Michel Barnier elimina el impuesto a la electricidad de los Presupuestos 2025 tras presiones políticas, buscando apoyo para evitar una moción de censura.
El primer ministro de Francia, Michel Barnier, anunció la eliminación del impuesto sobre la electricidad en el proyecto de Presupuestos para 2025, decisión tomada tras exigencias de la extrema derecha liderada por Marine Le Pen.
Esta medida busca evitar una moción de censura contra su Ejecutivo, apenas tres meses después de su nombramiento.
El impuesto sobre la electricidad, originalmente planeado para recaudar 3,000 millones de euros, se justificaba como una herramienta para reducir el déficit público. Sin embargo, Barnier aseguró que la factura eléctrica de los consumidores bajará un 14%, en lugar del 9% inicialmente previsto con la aplicación del impuesto.
Aunque esta decisión fue bien recibida por la ultraderecha, Le Pen y su partido consideran que aún existen “líneas rojas” para otorgar su apoyo, incluyendo la revalorización de las pensiones al nivel de la inflación desde enero próximo, el mantenimiento de ayudas empresariales y la cobertura de medicamentos por la Seguridad Social.
La medida también desató tensiones en el panorama político francés, ya que otros grupos cuestionan las negociaciones entre Barnier y Le Pen. Por su parte, la extrema derecha propone recortar programas de ayuda médica a migrantes, reducir la contribución de Francia a la Unión Europea y realizar otros “ahorros estructurales” como alternativas para controlar el déficit público sin aumentar los impuestos.
La reunión del lunes pasado entre Barnier y Le Pen marcó un giro significativo en las negociaciones políticas, reflejando los desafíos que enfrenta el Gobierno para aprobar su proyecto de presupuestos y mantener la estabilidad del Ejecutivo.