Fondos impulsarán eficiencia energética y redes de recarga eléctrica, buscando reducir emisiones y promover empleo en el sector verde en Estados Unidos.
La Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA) asignó 20 mil millones de dólares en subvenciones para promover proyectos de energía sostenible en todo el país.
Este financiamiento, proveniente del Fondo Nacional para Inversiones Limpias, apoyará tanto a organizaciones sin fines de lucro como a bancos de desarrollo comunitario en esfuerzos como mejorar la eficiencia energética de las viviendas y desarrollar infraestructura de recarga para vehículos eléctricos.
Una porción significativa, 14 mil millones de dólares, se canalizará a través de tres entidades sin fines de lucro que colaborarán con estados y el sector privado en la provisión de financiamiento accesible, mientras que los 6 mil millones restantes apoyarán a cinco instituciones en la oferta de asistencia técnica y financiamiento de proyectos a las comunidades.
Este esfuerzo de la administración Biden apunta a movilizar inversión privada para combatir la contaminación, reducir los costos energéticos, mejorar la salud pública y generar empleos en el sector de la energía verde.
La vicepresidenta Kamala Harris destacó el papel de estas subvenciones en brindar el capital necesario para la realización de iniciativas climáticas y de energía limpia, con el fin de reducir las emisiones de dióxido de carbono del país en 40 millones de toneladas anuales, alineándose con el compromiso de la actual administración de reducir las emisiones en un 52% para 2030 y alcanzar emisiones netas cero para 2050.
Fondos impulsarán eficiencia energética y redes de recarga eléctrica, buscando reducir emisiones y promover empleo en el sector verde en Estados Unidos.
La Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA) asignó 20 mil millones de dólares en subvenciones para promover proyectos de energía sostenible en todo el país.
Este financiamiento, proveniente del Fondo Nacional para Inversiones Limpias, apoyará tanto a organizaciones sin fines de lucro como a bancos de desarrollo comunitario en esfuerzos como mejorar la eficiencia energética de las viviendas y desarrollar infraestructura de recarga para vehículos eléctricos.
Una porción significativa, 14 mil millones de dólares, se canalizará a través de tres entidades sin fines de lucro que colaborarán con estados y el sector privado en la provisión de financiamiento accesible, mientras que los 6 mil millones restantes apoyarán a cinco instituciones en la oferta de asistencia técnica y financiamiento de proyectos a las comunidades.
Este esfuerzo de la administración Biden apunta a movilizar inversión privada para combatir la contaminación, reducir los costos energéticos, mejorar la salud pública y generar empleos en el sector de la energía verde.
La vicepresidenta Kamala Harris destacó el papel de estas subvenciones en brindar el capital necesario para la realización de iniciativas climáticas y de energía limpia, con el fin de reducir las emisiones de dióxido de carbono del país en 40 millones de toneladas anuales, alineándose con el compromiso de la actual administración de reducir las emisiones en un 52% para 2030 y alcanzar emisiones netas cero para 2050.