El procesamiento de crudo de Pemex cayó 17% en octubre, con desafíos operativos en la refinería Olmeca y bajas en Tula y Salina Cruz.
Petróleos Mexicanos (Pemex) reportó una reducción del 17% en el procesamiento de crudo en sus refinerías durante octubre, alcanzando un volumen de 730 mil 744 barriles diarios, el nivel más bajo en 12 meses. La nueva refinería Olmeca en Dos Bocas no registró actividad, tras haber procesado crudo por última vez en septiembre.
La refinería Olmeca, que inició pruebas en junio, experimentó un descenso en su capacidad operativa debido a un incidente eléctrico, según Víctor Rodríguez Padilla, director general de Pemex. Aunque se espera que ambos trenes de producción estén operativos para finales de noviembre, la planta enfrenta desafíos para alcanzar su capacidad máxima de 220 mil barriles diarios.
Otras refinerías de Pemex también sufrieron caídas significativas en el procesamiento de crudo. En Tula, Hidalgo, el volumen se redujo en un 38%, pasando de 204,741 barriles diarios en septiembre a 126,565 en octubre. En Salina Cruz, Oaxaca, la reducción fue del 49%, alcanzando solo 115 mil 596 barriles diarios.
La caída en los niveles de procesamiento ocurre mientras Pemex avanza en proyectos estratégicos como la coquizadora de Tula, cuyo arranque se postergó hasta 2025, y una nueva coquizadora en Salina Cruz, contemplada en los planes de la nueva administración.
El desempeño del Sistema Nacional de Refinación sigue siendo un tema crítico para la autosuficiencia energética de México, con retos significativos en infraestructura y operación.
El procesamiento de crudo de Pemex cayó 17% en octubre, con desafíos operativos en la refinería Olmeca y bajas en Tula y Salina Cruz.
Petróleos Mexicanos (Pemex) reportó una reducción del 17% en el procesamiento de crudo en sus refinerías durante octubre, alcanzando un volumen de 730 mil 744 barriles diarios, el nivel más bajo en 12 meses. La nueva refinería Olmeca en Dos Bocas no registró actividad, tras haber procesado crudo por última vez en septiembre.
La refinería Olmeca, que inició pruebas en junio, experimentó un descenso en su capacidad operativa debido a un incidente eléctrico, según Víctor Rodríguez Padilla, director general de Pemex. Aunque se espera que ambos trenes de producción estén operativos para finales de noviembre, la planta enfrenta desafíos para alcanzar su capacidad máxima de 220 mil barriles diarios.
Otras refinerías de Pemex también sufrieron caídas significativas en el procesamiento de crudo. En Tula, Hidalgo, el volumen se redujo en un 38%, pasando de 204,741 barriles diarios en septiembre a 126,565 en octubre. En Salina Cruz, Oaxaca, la reducción fue del 49%, alcanzando solo 115 mil 596 barriles diarios.
La caída en los niveles de procesamiento ocurre mientras Pemex avanza en proyectos estratégicos como la coquizadora de Tula, cuyo arranque se postergó hasta 2025, y una nueva coquizadora en Salina Cruz, contemplada en los planes de la nueva administración.
El desempeño del Sistema Nacional de Refinación sigue siendo un tema crítico para la autosuficiencia energética de México, con retos significativos en infraestructura y operación.