Esta financiación se enmarca en la estrategia europea para reducir la dependencia de la Unión Europea de las importaciones de combustibles fósiles y acelerar la transición hacia fuentes de energía con bajas emisiones de carbono
El Banco Europeo de Inversiones (BEI) y Orano, una empresa francesa que se dedica a la minería de uranio y al apoyo de las operaciones nucleares han anunciado la firma de un acuerdo de préstamo de 400 millones de euros destinado a financiar una parte de las inversiones en el proyecto de ampliación de la planta de enriquecimiento de uranio Georges Besse 2 situada en Tricastin, Francia.
A través de un comunicado se dio a conocer que esta financiación se enmarca en la estrategia europea para reducir la dependencia de la Unión Europea de las importaciones de combustibles fósiles y acelerar la transición hacia fuentes de energía con bajas emisiones de carbono. Además que contribuye a reforzar la soberanía energética y la autonomía estratégica de Europa, así como a mejorar la seguridad del suministro.
La experiencia acumulada por la empresa en el enriquecimiento de uranio para la producción de energía con bajas emisiones de carbono se está aprovechando al máximo para lograr estos objetivos. La ampliación de la capacidad de la planta de Tricastin es una respuesta a la necesidad de los clientes de servicios públicos del grupo Orano de asegurar el suministro.
Acerca del proyecto
Las operaciones productivas iniciales están previstas para 2028 y la puesta en servicio completa para 2030.
El proyecto prevé aumentar en un 30% la capacidad de producción de enriquecimiento de uranio (2.5 millones de SWU (unidades de trabajo de separación, la unidad de medida estándar internacional para cuantificar la producción derivada de la actividad de enriquecimiento) adicionales) con el fin de reforzar las capacidades globales de enriquecimiento en Europa.
Las obras están compuestas por cuatro módulos que complementarán los 14 ya existentes, todos ellos con la misma tecnología reconocida y probada, ofreciendo las mejores garantías en términos de seguridad, competitividad y ahorro energético, a la vez que una huella ambiental reducida.
Con este préstamo del BEI, que respaldará una inversión global de casi 1 mil 700 millones de euros, Orano financiará instalaciones que utilizarán tecnologías europeas y recurrirán en su mayor parte a los servicios de empresas francesas. La primera piedra del proyecto de ampliación se colocó el 10 de octubre de 2024.
Recordemos que este proyecto fue objeto de una notificación de conformidad con el artículo 41 del Tratado Euratom el 7 de septiembre de 2023. La Comisión Europea emitió un dictamen positivo el 9 de octubre de 2024, subrayando la conformidad del proyecto con el Tratado Euratom y su contribución a la seguridad del suministro en Europa.
Nuevas tecnologías energéticas
El BEI adopta un enfoque tecnológicamente neutral, en consonancia con el objetivo de descarbonización de la Unión Europea y los objetivos de lograr competitividad y seguridad del suministro energético de una manera ambientalmente sostenible, eficiente, segura, socialmente aceptable y rentable.
En el marco del programa REPowerEU (un plan de UE para ser más independiente de los combustibles fósiles rusos) de la Comisión Europea, el Grupo BEI apoya activamente proyectos destinados a promover la transición energética y reforzar la autonomía de Europa en este ámbito clave para su seguridad y competitividad.
En 2024, el Banco concedió una financiación récord de 31 mil millones de euros para la seguridad energética europea, lo que permitió movilizar un total de más de 100 mil millones de euros de inversiones en energías renovables, redes e interconexiones, eficiencia energética y almacenamiento.
“Esta importante financiación del BEI contribuye a la independencia energética europea”, explica Ambroise Fayolle, vicepresidente del BEI.
“Las energías descarbonizadas son esenciales para que la Unión Europea pueda cumplir los ambiciosos objetivos de neutralidad climática que se ha fijado”, agregó.
Nicolas Maes, director general de Orano, añadió: “Estamos muy orgullosos de esta colaboración, que supone un nuevo reconocimiento del valor estratégico de nuestro plan de inversiones para el clima y para la producción de energía sostenible y descarbonizada”.
“La financiación concedida por el BEI para la ampliación de la capacidad de nuestra planta de enriquecimiento Georges Besse 2 se ajusta perfectamente a este objetivo, ya que el proyecto permitirá aumentar el número de hogares abastecidos con energía baja en carbono hasta un total de 120 millones. Además, en el contexto geopolítico actual, este apoyo a nuestras actividades por parte del BEI contribuirá a reforzar la seguridad del suministro en la Unión Europea”, finalizó.