Mientras que los niveles de producción continúan a la baja en Venezuela, provocando que las importaciones de crudo pesado de ese país a las refinerías en la costa del Golfo de México se encuentren en su nivel más bajo en la historia, estas últimas se preparan para la posible imposición de sanciones contra el petróleo venezolano.
De acuerdo a un reporte de S&P Global Platts, cinco refinerías que importan la mayoría del crudo venezolano a los Estados Unidos iniciaron la compra de crudo en Chad, Colombia e Irak, como medida de preparación ante el embargo petrolero a Venezuela y como respuesta a la disminución en el volumen de crudo exportado.
La administración del Presidente Donald Trump prepara una serie de sanciones contra el sector petrolero del país sudamericano, lo que afectaría gravemente el suministro de crudo a las refinerías norteamericanas en el Golfo de México.
Los nombramientos de Mike Pompeo y John Bolton como secretario de Estado y asesor de seguridad nacional respectivamente, aumentaron las probabilidades de que se concreten sanciones a las exportaciones de crudo provenientes de Venezuela.
Las refinerías en Estados Unidos importaron 438 mil barriles de crudo en enero, frente a los 1.49 millones de barriles que se compraron en mayo de 2017, esto muestra la disminución en el volumen de crudo comercializado.
Venezuela produjo en febrero de este año 1.57 millones de barriles, 730 mil barriles menos que en 2016, de acuerdo a un reporte de Platts.