Por: Enrique Malpica
En esta segunda entrega quisiera abordar en específico el tema de las nuevas tecnologías que se están implementando en las diferentes Regiones de México para la explotación de los pozos los cuales cuentan con crudo pesado.
De primera mano hay que resaltar que la mayor parte de los recursos de hidrocarburo del mundo corresponde a hidrocarburos viscosos y pesados, que son complejos al momento de extraerlos, caros de producir y refinar en comparación a los convencionales. Por lo general, mientras más pesado o denso es el crudo, menor es su valor económico, es decir, a mayores procesos este envuelto el hidrocarburo es menor su precio.
Surge la incógnita acerca del porqué el interés de las compañías petroleras en comprometer recursos para extraerlo. La respuesta es muy sencilla ya que muchos yacimientos de hidrocarburo pesado ahora pueden ser explotados de forma rentable y tener los resultados esperados para las diferentes operadoras de campo que deciden extraerlos.
Debido a la demanda energética que tenemos hoy en día y a la declinación tan rápida de los yacimientos, se ha vuelto una necesidad recurrir a la implementación de diversos Sistemas Artificiales de Producción que permiten contar con mayor rentabilidad de los proyectos, tener una mayor producción y alargar la vida productiva de los pozos, estos sistemas han adquirido suma importancia y amplia aplicación ya que con el paso del tiempo nos encontramos con diferentes retos en las distintas regiones de México. Esto ha incitado a que las compañías elaboren nuevas tecnologías o realicen innovaciones a los que actualmente existen con la finalidad de ajustarse a las necesidades de cualquier pozo, creando nuevas oportunidades de explotación a esos pozos que no los volteaban ni a ver.
En México el aceite pesado y extra pesado se encuentra en los yacimientos marinos y terrestres, siendo el más importante Ku Maloob Zaap. En la Región Sur encontramos este tipo de aceite en el AIPBS 02 (Samaria Luna), en donde se realizan de forma cotidiana pruebas tecnológicas con la finalidad de identificar los sistemas de explotación óptimos para los pozos de aceite extra pesado, ya que actualmente es una necesidad incrementar y mantener la producción. El sistema de levantamiento artificial objeto de este ensayo es el Bombeo de Cavidades Progresivas con rotor y estator metálico.
Para entrar en contexto, el principio de operación de esta tecnología es igual a la de un Bombeo de Cavidades Progresivas convencional “tornillo sin fin”, no obstante, tiene características que lo hacen más efectivo tales como: manejo de altas temperaturas (350 °C) sin afectar los componentes, producción de fluidos con alto contenido de H2S y CO2, buen manejo de sólidos y fluidos altamente viscosos, inyección de vapor a través del estator, permite su uso en pozos que utilicen métodos de recuperación mejorada. Está tecnología ha tenido excelentes resultados alrededor del mundo y en México no es la excepción.
Esta prueba además de presentar lo innovador del estator y rotor metálicos, hizo uso de la varilla hueca como medio de transmisión de la energía al fondo, un método no utilizado en México hasta la fecha que permite fluir la producción por dentro de la varilla, además de contar con propiedades mecánicas superiores a las de la varilla convencional, dando la resistencia necesaria para operar en condiciones extremas como lo fue en Samaria.
La prueba resulto ser muy exitosa, incrementando la producción de los pozos hasta en un 170% en comparación con otros sistemas y operando de forma inmediata después de la inyección de vapor.
El costo del equipo y componentes es relativamente alto, sin embargo, al realizar el análisis costo- beneficio da como resultado un sistema rentable y una opción a implementar cuando hablamos de la explotación de los crudos pesados, extra pesados. Los retos que implica el producir este tipo de aceite nos llevan a buscar alternativas modernas, desarrollo de tecnología y salirnos de la caja en cuanto a las ideas. Lo que nos ayuda a concluir
Por: Enrique Malpica
En esta segunda entrega quisiera abordar en específico el tema de las nuevas tecnologías que se están implementando en las diferentes Regiones de México para la explotación de los pozos los cuales cuentan con crudo pesado.
De primera mano hay que resaltar que la mayor parte de los recursos de hidrocarburo del mundo corresponde a hidrocarburos viscosos y pesados, que son complejos al momento de extraerlos, caros de producir y refinar en comparación a los convencionales. Por lo general, mientras más pesado o denso es el crudo, menor es su valor económico, es decir, a mayores procesos este envuelto el hidrocarburo es menor su precio.
Surge la incógnita acerca del porqué el interés de las compañías petroleras en comprometer recursos para extraerlo. La respuesta es muy sencilla ya que muchos yacimientos de hidrocarburo pesado ahora pueden ser explotados de forma rentable y tener los resultados esperados para las diferentes operadoras de campo que deciden extraerlos.
Debido a la demanda energética que tenemos hoy en día y a la declinación tan rápida de los yacimientos, se ha vuelto una necesidad recurrir a la implementación de diversos Sistemas Artificiales de Producción que permiten contar con mayor rentabilidad de los proyectos, tener una mayor producción y alargar la vida productiva de los pozos, estos sistemas han adquirido suma importancia y amplia aplicación ya que con el paso del tiempo nos encontramos con diferentes retos en las distintas regiones de México. Esto ha incitado a que las compañías elaboren nuevas tecnologías o realicen innovaciones a los que actualmente existen con la finalidad de ajustarse a las necesidades de cualquier pozo, creando nuevas oportunidades de explotación a esos pozos que no los volteaban ni a ver.
En México el aceite pesado y extra pesado se encuentra en los yacimientos marinos y terrestres, siendo el más importante Ku Maloob Zaap. En la Región Sur encontramos este tipo de aceite en el AIPBS 02 (Samaria Luna), en donde se realizan de forma cotidiana pruebas tecnológicas con la finalidad de identificar los sistemas de explotación óptimos para los pozos de aceite extra pesado, ya que actualmente es una necesidad incrementar y mantener la producción. El sistema de levantamiento artificial objeto de este ensayo es el Bombeo de Cavidades Progresivas con rotor y estator metálico.
Para entrar en contexto, el principio de operación de esta tecnología es igual a la de un Bombeo de Cavidades Progresivas convencional “tornillo sin fin”, no obstante, tiene características que lo hacen más efectivo tales como: manejo de altas temperaturas (350 °C) sin afectar los componentes, producción de fluidos con alto contenido de H2S y CO2, buen manejo de sólidos y fluidos altamente viscosos, inyección de vapor a través del estator, permite su uso en pozos que utilicen métodos de recuperación mejorada. Está tecnología ha tenido excelentes resultados alrededor del mundo y en México no es la excepción.
Esta prueba además de presentar lo innovador del estator y rotor metálicos, hizo uso de la varilla hueca como medio de transmisión de la energía al fondo, un método no utilizado en México hasta la fecha que permite fluir la producción por dentro de la varilla, además de contar con propiedades mecánicas superiores a las de la varilla convencional, dando la resistencia necesaria para operar en condiciones extremas como lo fue en Samaria.
La prueba resulto ser muy exitosa, incrementando la producción de los pozos hasta en un 170% en comparación con otros sistemas y operando de forma inmediata después de la inyección de vapor.
El costo del equipo y componentes es relativamente alto, sin embargo, al realizar el análisis costo- beneficio da como resultado un sistema rentable y una opción a implementar cuando hablamos de la explotación de los crudos pesados, extra pesados. Los retos que implica el producir este tipo de aceite nos llevan a buscar alternativas modernas, desarrollo de tecnología y salirnos de la caja en cuanto a las ideas. Lo que nos ayuda a concluir