La mezcla mexicana inicia la semana perdiendo 1.70% debido a los temores de mayores contagios de COVID-19 en China.
La mezcla mexicana de petróleo registró una pérdida de 1.70% o 1.10 dólares frente al precio de cierre del viernes, al cotizarse en el mercado energético internacional en 63.49 dólares por barril, informó Petróleos Mexicanos (Pemex).
Con el resultado obtenido hoy, el petróleo mexicano alcanzó promedio anual a 61.59 dólares por barril.
El petróleo mexicano acumula dos semanas a la baja semana en las cuales ha perdido 9.65% debido a los temores de que la tercera ola de COVID-19 ralentice la economía de China y Estados Unidos.
El petróleo WTI cerró este lunes con un retroceso del 1,7 %, hasta 67,29 dólares el barril, lastrado por el temor a un enfriamiento de la demanda en China.
Mientras que el Brent para entrega en octubre terminó este lunes en el mercado de futuros de Londres en 69.67 dólares, un 1.23% menos que al finalizar la sesión anterior.
Por su parte, los contratos de gasolina con vencimiento en septiembre restaron 6 centavos y terminaron en 2.20 dólares el galón, mientras los de gas natural para entrega el mismo mes sumaron casi 9 centavos hasta 3.95 dólares por cada mil pies cúbicos.
Este lunes, influyeron datos sobre la producción industrial y las ventas minoristas en China en julio que apuntan a un menor crecimiento, en medio del repunte de casos de COVID-19 que ha llevado a imponer restricciones en algunos puntos.
Las preocupaciones “por la propagación de la variante delta en China y los efectos que ello tendrá sobre la demanda de crudo siguen pesando en los precios”, dijeron analistas de Commerzbank hoy en una nota.
En su informe mensual, la OPEP consideró que el impacto de la variante delta en la economía mundial plantea una importante incertidumbre, pero mantuvo sus previsiones para la demanda de petróleo en 2021 y 2022.
Sin embargo, la evolución de la pandemia será “el factor determinante en el ritmo de la recuperación, con la posible aparición de nuevas variantes o mutaciones como riesgo”, agregó la OPEP.
Por su parte, la Agencia Internacional de la Energía dijo el jueves que espera una ralentización en el crecimiento de la demanda de crudo para el resto de este año debido al resurgimiento de la covid-19.
Grandes bancos como Goldman Sachs y JPMorgantambién han mostrado su inquietud por el aumento de casos atribuido a la variante delta y han rebajado sus expectativas sobre el sector, según medios especializados.
La mezcla mexicana inicia la semana perdiendo 1.70% debido a los temores de mayores contagios de COVID-19 en China.
La mezcla mexicana de petróleo registró una pérdida de 1.70% o 1.10 dólares frente al precio de cierre del viernes, al cotizarse en el mercado energético internacional en 63.49 dólares por barril, informó Petróleos Mexicanos (Pemex).
Con el resultado obtenido hoy, el petróleo mexicano alcanzó promedio anual a 61.59 dólares por barril.
El petróleo mexicano acumula dos semanas a la baja semana en las cuales ha perdido 9.65% debido a los temores de que la tercera ola de COVID-19 ralentice la economía de China y Estados Unidos.
El petróleo WTI cerró este lunes con un retroceso del 1,7 %, hasta 67,29 dólares el barril, lastrado por el temor a un enfriamiento de la demanda en China.
Mientras que el Brent para entrega en octubre terminó este lunes en el mercado de futuros de Londres en 69.67 dólares, un 1.23% menos que al finalizar la sesión anterior.
Por su parte, los contratos de gasolina con vencimiento en septiembre restaron 6 centavos y terminaron en 2.20 dólares el galón, mientras los de gas natural para entrega el mismo mes sumaron casi 9 centavos hasta 3.95 dólares por cada mil pies cúbicos.
Este lunes, influyeron datos sobre la producción industrial y las ventas minoristas en China en julio que apuntan a un menor crecimiento, en medio del repunte de casos de COVID-19 que ha llevado a imponer restricciones en algunos puntos.
Las preocupaciones “por la propagación de la variante delta en China y los efectos que ello tendrá sobre la demanda de crudo siguen pesando en los precios”, dijeron analistas de Commerzbank hoy en una nota.
En su informe mensual, la OPEP consideró que el impacto de la variante delta en la economía mundial plantea una importante incertidumbre, pero mantuvo sus previsiones para la demanda de petróleo en 2021 y 2022.
Sin embargo, la evolución de la pandemia será “el factor determinante en el ritmo de la recuperación, con la posible aparición de nuevas variantes o mutaciones como riesgo”, agregó la OPEP.
Por su parte, la Agencia Internacional de la Energía dijo el jueves que espera una ralentización en el crecimiento de la demanda de crudo para el resto de este año debido al resurgimiento de la covid-19.
Grandes bancos como Goldman Sachs y JPMorgantambién han mostrado su inquietud por el aumento de casos atribuido a la variante delta y han rebajado sus expectativas sobre el sector, según medios especializados.