Mezcla mexicana inició la semana perdiendo 3.51% debido al avance de la variable omicrón de COVID-19.
La mezcla mexicana de petróleo registró una caída de 3.51% o 2.31 dólares frente al precio de cierre del viernes, al cotizarse en el mercado energético internacional en 63.43 dólares por barril, informó Petróleos Mexicanos (Pemex).
Con el resultado obtenido hoy, la mezcla mexicana de petróleo alcanzó promedio anual a 64.68 dólares por barril.
El WTI cerró este lunes con una pérdida del 3.85% y se situó en 68.23 dólares, por el temor a las consecuencias que pueda tener el rampante repunte de casos de COVID-19 en la demanda de combustibles.
Mientras que el Brent para entrega en febrero terminó este lunes en el mercado de futuros de Londres en 71.65 dólares, un 2.56% menos que al finalizar la sesión anterior.
Por otra parte, los contratos de gas natural para entrega en enero restaron 7 centavos hasta los 3.69 dólares por cada mil pies cúbicos.
Mientras que los contratos de gasolina con vencimiento el mismo mes bajaron 3 centavos hasta 2.09 dólares el galón.
El petróleo suma dos días consecutivos en rojo preocupado por el repunte de casos y las restricciones que se han empezado a tomar en varios países y se estudian en otros para detener su propagación.
“Realmente estamos viendo cómo ómicron se propaga como la pólvora, y eso pesa sobre la confianza”, dijo la directora de inversiones de FlowBank, Esty Dwek, citada por el Wall Street Journal.
La variante ómicron ya pesó la semana pasada en el WTI que en el cómputo semanal perdió un 1.13%.
La semana pasada también, la Agencia Internacional de la Energía (AIE) ya adelantó que esperaba una relajación de los elevados precios globales del petróleo para 2022 debido al aumento de la producción, la liberación de reservas, el incremento del refino y la irrupción de la nueva variante de la COVID-19.
En el informe semanal sobre el mercado de petróleo, la agencia planteó que la demanda mundial de crudo reducirá temporalmente su recuperación, pero sin frenarla, debido al nuevo aumento global de casos de covid, y volverá en 2022 a sus niveles prepandemia.
Mezcla mexicana inició la semana perdiendo 3.51% debido al avance de la variable omicrón de COVID-19.
La mezcla mexicana de petróleo registró una caída de 3.51% o 2.31 dólares frente al precio de cierre del viernes, al cotizarse en el mercado energético internacional en 63.43 dólares por barril, informó Petróleos Mexicanos (Pemex).
Con el resultado obtenido hoy, la mezcla mexicana de petróleo alcanzó promedio anual a 64.68 dólares por barril.
El WTI cerró este lunes con una pérdida del 3.85% y se situó en 68.23 dólares, por el temor a las consecuencias que pueda tener el rampante repunte de casos de COVID-19 en la demanda de combustibles.
Mientras que el Brent para entrega en febrero terminó este lunes en el mercado de futuros de Londres en 71.65 dólares, un 2.56% menos que al finalizar la sesión anterior.
Por otra parte, los contratos de gas natural para entrega en enero restaron 7 centavos hasta los 3.69 dólares por cada mil pies cúbicos.
Mientras que los contratos de gasolina con vencimiento el mismo mes bajaron 3 centavos hasta 2.09 dólares el galón.
El petróleo suma dos días consecutivos en rojo preocupado por el repunte de casos y las restricciones que se han empezado a tomar en varios países y se estudian en otros para detener su propagación.
“Realmente estamos viendo cómo ómicron se propaga como la pólvora, y eso pesa sobre la confianza”, dijo la directora de inversiones de FlowBank, Esty Dwek, citada por el Wall Street Journal.
La variante ómicron ya pesó la semana pasada en el WTI que en el cómputo semanal perdió un 1.13%.
La semana pasada también, la Agencia Internacional de la Energía (AIE) ya adelantó que esperaba una relajación de los elevados precios globales del petróleo para 2022 debido al aumento de la producción, la liberación de reservas, el incremento del refino y la irrupción de la nueva variante de la COVID-19.
En el informe semanal sobre el mercado de petróleo, la agencia planteó que la demanda mundial de crudo reducirá temporalmente su recuperación, pero sin frenarla, debido al nuevo aumento global de casos de covid, y volverá en 2022 a sus niveles prepandemia.