YPF elevó el precio de venta de las gasolinas debido al aumento en el precio internacional de las gasolinas por el conflicto en Ucrania.
La petrolera estatal argentina, YPF, anunció ayer que aumentará en promedio 9.5% el precio de venta de las gasolinas, en medio de un aumento en el precio internacional del petróleo tras la invasión de Rusia a Ucrania.
YPF, el mayor productor y comercializador de petrolíferos de Argentina, dijo que el aumento, establecido desde la medianoche de este domingo, será del 11.5% promedio para los denominados combustibles “premium”.
A inicios de febrero pasado, las gasolinas ya habían aumentado un 9%.
“Este ajuste responde a la evolución de las principales variables que conforman el precio de venta al público, sobre todo el aumento de los precios internacionales del petróleo y los niveles de demanda superiores a la prepandemia, que requieren importaciones para complementar la oferta local”, alegó la compañía.
La petrolera recordó en un comunicado que los precios internacionales del petróleo se incrementaron “significativamente” durante las últimas semanas, “alcanzando niveles récords” de un “50% por encima de los precios de inicios de febrero” último.
“Adicionalmente, el precio internacional de los combustibles con los que se complementa la oferta local aumentó incluso por encima del petróleo crudo”, indicó la empresa, cuyos precios sirven de referencia para otras compañías privadas que operan en el mercado doméstico de comercialización de combustibles.
YPF dijo que, luego de este ajuste, “continuará monitoreando la evolución de las variables que inciden en la formación de precios, teniendo en consideración las particularidades del contexto macroeconómico del país y la realidad internacional”.
El aumento se da en momentos en que Argentina se apresta a aprobar un acuerdo definitivo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para refinanciar pesadas dudas y que, entre otras metas, le obligará a hacer fuertes recortes en los subsidios estatales a la energía que se han vuelto aún más desafiantes desde el aumento en el valor del petróleo y el gas a partir del conflicto bélico en Ucrania.
YPF elevó el precio de venta de las gasolinas debido al aumento en el precio internacional de las gasolinas por el conflicto en Ucrania.
La petrolera estatal argentina, YPF, anunció ayer que aumentará en promedio 9.5% el precio de venta de las gasolinas, en medio de un aumento en el precio internacional del petróleo tras la invasión de Rusia a Ucrania.
YPF, el mayor productor y comercializador de petrolíferos de Argentina, dijo que el aumento, establecido desde la medianoche de este domingo, será del 11.5% promedio para los denominados combustibles “premium”.
A inicios de febrero pasado, las gasolinas ya habían aumentado un 9%.
“Este ajuste responde a la evolución de las principales variables que conforman el precio de venta al público, sobre todo el aumento de los precios internacionales del petróleo y los niveles de demanda superiores a la prepandemia, que requieren importaciones para complementar la oferta local”, alegó la compañía.
La petrolera recordó en un comunicado que los precios internacionales del petróleo se incrementaron “significativamente” durante las últimas semanas, “alcanzando niveles récords” de un “50% por encima de los precios de inicios de febrero” último.
“Adicionalmente, el precio internacional de los combustibles con los que se complementa la oferta local aumentó incluso por encima del petróleo crudo”, indicó la empresa, cuyos precios sirven de referencia para otras compañías privadas que operan en el mercado doméstico de comercialización de combustibles.
YPF dijo que, luego de este ajuste, “continuará monitoreando la evolución de las variables que inciden en la formación de precios, teniendo en consideración las particularidades del contexto macroeconómico del país y la realidad internacional”.
El aumento se da en momentos en que Argentina se apresta a aprobar un acuerdo definitivo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para refinanciar pesadas dudas y que, entre otras metas, le obligará a hacer fuertes recortes en los subsidios estatales a la energía que se han vuelto aún más desafiantes desde el aumento en el valor del petróleo y el gas a partir del conflicto bélico en Ucrania.