Rusia advirtió de nueva cuenta de los impactos que causaría en el mercado las sanciones al petróleo ruso.
El viceprimer ministro ruso y exministro de Energía, Alexandr Novak, advirtió, otra vez, que un embargo al petróleo de su país, como posible represalia a la campaña militar rusa en Ucrania, elevaría los precios del crudo a 300 dólares por barril, con la posibilidad de un mayor aumento.
La Unión Europea analizará hoy y mañana prohibir la importación de petróleo y carbón debido a la masacre realizada por tropas rusas en Bucha.
“Si hay renuncia (al crudo ruso), los precios subirán a unos 300 dólares, y algunos creen que a hasta 500 dólares”, dijo Nóvak.
El exministro de Energía opinó no obstante que actualmente es imposible renunciar a los hidrocarburos rusos, pero dijo que “estas declaraciones se hacen porque son importantes para los políticos”.
“En todo caso, vamos a tratar de ampliar los suministros al creciente mercado de la región de Asia-Pacífico”, dijo citado por la agencia Interfax.
Expertos han señalado que el conflicto entre Rusia y Ucrania podría derivar en una crisis energética global, debido a la falta de suministros para abastecer la demanda de petróleo y gas cuando el mundo se recupera de la pandemia de COVID-19.
Rusia advirtió de nueva cuenta de los impactos que causaría en el mercado las sanciones al petróleo ruso.
El viceprimer ministro ruso y exministro de Energía, Alexandr Novak, advirtió, otra vez, que un embargo al petróleo de su país, como posible represalia a la campaña militar rusa en Ucrania, elevaría los precios del crudo a 300 dólares por barril, con la posibilidad de un mayor aumento.
La Unión Europea analizará hoy y mañana prohibir la importación de petróleo y carbón debido a la masacre realizada por tropas rusas en Bucha.
“Si hay renuncia (al crudo ruso), los precios subirán a unos 300 dólares, y algunos creen que a hasta 500 dólares”, dijo Nóvak.
El exministro de Energía opinó no obstante que actualmente es imposible renunciar a los hidrocarburos rusos, pero dijo que “estas declaraciones se hacen porque son importantes para los políticos”.
“En todo caso, vamos a tratar de ampliar los suministros al creciente mercado de la región de Asia-Pacífico”, dijo citado por la agencia Interfax.
Expertos han señalado que el conflicto entre Rusia y Ucrania podría derivar en una crisis energética global, debido a la falta de suministros para abastecer la demanda de petróleo y gas cuando el mundo se recupera de la pandemia de COVID-19.