La UE propone que las sanciones sean escalonadas y no directas para no afectar a países más dependientes de los hidrocarburos rusos.
La Unión Europea (UE) intenta solventar las inconvenientes que podría provocar en algunos miembros las sanciones a las compras de petróleo ruso, luego de los cortes al suministro a Polonia y Bulgaria.
Los ministros de Energía de la UE se reunión hoy de emergencia para discutir opciones ante el corte de suministro de gas natural por parte de Gazprom a Polonia y Bulgaria la semana pasada.
Alemania y Austria ahora se muestran con disponibilidad para prohibir las importaciones de petróleo ruso, luego de mostrarse reacios a implementar las sanciones debido a su alta dependencia a los hidrocarburos de Moscú.
“Austria está dispuesta a apoyar un embargo de petróleo de forma consecuente si la Comisión y los Estados miembros así lo deciden. Estamos preparados, puedo decirlo”, afirmó la ministra austríaca de Energía, Leonore Gewessler.
“Alemania no está en contra de una prohibición al petróleo de Rusia”, dijo el ministro de Energía de Alemania, Robert Habeck.
Los ministros de la EU plantean que el embargo sea gradual, lo que le permitiría a países mas dependientes del petróleo ruso, como Hungría y Grecia, a encontrar alternativas de suministro.
La Comisión Europea no ha querido detallar todavía el contenido del que será el sexto paquete de sanciones contra Rusia y en que se espera incluyan estas sanciones.