El petróleo abrió con ligeras ganancias debido al aumento en la demanda de combustibles en los Estados Unidos.
Los precios del petróleo escalaban el viernes y estaban en camino de anotar otra ganancia semanal impulsada por una sólida demanda de combustible en Estados Unidos, aunque las nuevas alertas por COVID-19 en Shanghái y Pekín limitaban las alzas.
Los futuros del crudo Brent sumaban 1.1 dólares, o un 0.89%, a 124.19 dólares el barril, a las 1130 GMT, mientras que los futuros del petróleo estadounidense WTI avanzaban 94 centavos, o un 0.77%, a 122.47 dólares el barril.
Dado que los precios en general han estado aumentando en los últimos dos meses, el Brent va en camino de una cuarta ganancia semanal consecutiva y el WTI se aprestaba a marcar una séptima alza semanal seguida.
“La temporada de viajes del verano (boreal) en Estados Unidos está experimentando aumentos récord en el consumo de gasolina y diésel”, dijeron analistas de Fitch Solutions. La demanda máxima de combustible ha llevado el precio de la gasolina a casi 5 dólares por galón en ese país.
Los precios del petróleo también eran respaldados por los temores de una posible interrupción del suministro en Europa.
La producción petrolera de Noruega podría reducirse si los trabajadores se declaran en huelga el domingo, dijo la Asociación Noruega de Petróleo y Gas (NOG). Unos 845 de los cerca de 7.500 empleados en plataformas marinas planean hacer huelga a partir del 12 de junio si fracasan las negociaciones salariales anuales con los empleadores.
Los precios de ambos contratos bajaron más de 1 dólar el barril al principio de la sesión en medio de nuevos confinamientos y restricciones en China.
Shanghái y Pekín volvieron a estar en alerta de COVID el jueves. Partes de Shanghái impusieron nuevas restricciones de cierre y la ciudad anunció una ronda de pruebas masivas para millones de residentes.
(Reporte adicional de Yuka Obayashi en Tokio y Koustav Samanta en Singapur; editado en español por Marion Giraldo)
El petróleo abrió con ligeras ganancias debido al aumento en la demanda de combustibles en los Estados Unidos.
Los precios del petróleo escalaban el viernes y estaban en camino de anotar otra ganancia semanal impulsada por una sólida demanda de combustible en Estados Unidos, aunque las nuevas alertas por COVID-19 en Shanghái y Pekín limitaban las alzas.
Los futuros del crudo Brent sumaban 1.1 dólares, o un 0.89%, a 124.19 dólares el barril, a las 1130 GMT, mientras que los futuros del petróleo estadounidense WTI avanzaban 94 centavos, o un 0.77%, a 122.47 dólares el barril.
Dado que los precios en general han estado aumentando en los últimos dos meses, el Brent va en camino de una cuarta ganancia semanal consecutiva y el WTI se aprestaba a marcar una séptima alza semanal seguida.
“La temporada de viajes del verano (boreal) en Estados Unidos está experimentando aumentos récord en el consumo de gasolina y diésel”, dijeron analistas de Fitch Solutions. La demanda máxima de combustible ha llevado el precio de la gasolina a casi 5 dólares por galón en ese país.
Los precios del petróleo también eran respaldados por los temores de una posible interrupción del suministro en Europa.
La producción petrolera de Noruega podría reducirse si los trabajadores se declaran en huelga el domingo, dijo la Asociación Noruega de Petróleo y Gas (NOG). Unos 845 de los cerca de 7.500 empleados en plataformas marinas planean hacer huelga a partir del 12 de junio si fracasan las negociaciones salariales anuales con los empleadores.
Los precios de ambos contratos bajaron más de 1 dólar el barril al principio de la sesión en medio de nuevos confinamientos y restricciones en China.
Shanghái y Pekín volvieron a estar en alerta de COVID el jueves. Partes de Shanghái impusieron nuevas restricciones de cierre y la ciudad anunció una ronda de pruebas masivas para millones de residentes.
(Reporte adicional de Yuka Obayashi en Tokio y Koustav Samanta en Singapur; editado en español por Marion Giraldo)