El IMP ha capacitado a los primeros 300 ingenieros que van a operar el sistema de refinación.
La secretaria de Energía, Rocío Nahle García, participó este miércoles en la ceremonia de conmemoración del 57 aniversario del Instituto Mexicano del Petróleo (IMP), donde destacó la gran labor que realiza esta institución reconocida en todo el mundo y que a lo largo de cinco décadas ha hecho historia en México siendo el brazo tecnológico del Gobierno y de la Empresa Productiva del Estado, Petróleos Mexicanos (Pemex), para tener seguridad técnica y tecnológica.
La Titular de la Secretaría de Energía (SENER), recordó que, gracias a la colaboración del IMP, la construcción de la Refinería Olmeca en Dos Bocas, Paraíso, Tabasco, ha sido un proyecto exitoso que no se hubiera podido concretar sin su colaboración y recalcó que ahora que esta infraestructura se encuentra en proceso de integración y preparación de las pruebas de arranque, el Instituto juega un papel fundamental ya que por décadas ha sido el capacitador de los operadores de las refinerías del país y de otras partes del mundo.
En ese sentido, adelantó que el IMP ha capacitado a los primeros 300 ingenieros que van a operar el sistema de refinación y próximamente serán otros 300, ya que se tiene un déficit de operadores.
Por otro lado, la encargada de la política energética sostuvo que la política dictada por el presidente Andrés Manuel López Obrador es congruente con los recursos naturales que se tienen, para sustentar la seguridad energética, ya que se tiene petróleo y gas que hay que resguardar.
Aunado a ello, reiteró que México es uno de los países privilegiados con hidrocarburos y por ello, se tuvo la visión de hacer una empresa petrolera y formar universidades y centros de investigación, como el Instituto Mexicano del Petróleo, que hoy son el soporte del este gobierno.
La secretaria Nahle García detalló que la nueva política energética del Gobierno de México no solo rescató a Pemex o al sector energético, sino también rescató a un cuerpo de científicos que no podía quedar marginado por una política diferente.