El acuerdo permitirá la transferencia pacífica de material nuclear, equipos e información de Estados Unidos a México.
Un acuerdo bilateral sobre energía nuclear entre Estados Unidos y México, que fue firmado en el 2018, ha entrado en vigor con miras a mejorar la cooperación en seguridad energética.
Se trata del “primer acuerdo bilateral para la cooperación nuclear pacífica” entre los dos países, dijo el Departamento de Estado estadounidense el miércoles por la noche.
Conocidos como acuerdos 123, estos allanan el camino para cuestiones delicadas como la transferencia pacífica de material nuclear, equipos e información de Estados Unidos en cumplimiento de los requisitos de no proliferación.
“Este acuerdo fortalecerá aún más la relación entre Estados Unidos y México y profundizará nuestra cooperación en materia de seguridad energética”, dijo en Twitter el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price.
México y Estados Unidos firmaron el convenio en 2018, pero el Senado de México no dio su visto bueno hasta marzo.
La CFE tiene una planta nuclear que opera dos reactores. La secretaria de Energía del país, Rocío Nahle, ha calificado la energía nuclear como “limpia, segura, constante y rentable”.
El enviado climático de la Casa Blanca, John Kerry, viajó a México la semana pasada para hablar sobre energía renovable con el presidente Andrés Manuel López Obrador, centrándose en el litio, las baterías y la industria automotriz.
(Reporte de Brendan O’Boyle. Editado en español por Ana Isabel Martínez)
El acuerdo permitirá la transferencia pacífica de material nuclear, equipos e información de Estados Unidos a México.
Un acuerdo bilateral sobre energía nuclear entre Estados Unidos y México, que fue firmado en el 2018, ha entrado en vigor con miras a mejorar la cooperación en seguridad energética.
Se trata del “primer acuerdo bilateral para la cooperación nuclear pacífica” entre los dos países, dijo el Departamento de Estado estadounidense el miércoles por la noche.
Conocidos como acuerdos 123, estos allanan el camino para cuestiones delicadas como la transferencia pacífica de material nuclear, equipos e información de Estados Unidos en cumplimiento de los requisitos de no proliferación.
“Este acuerdo fortalecerá aún más la relación entre Estados Unidos y México y profundizará nuestra cooperación en materia de seguridad energética”, dijo en Twitter el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price.
México y Estados Unidos firmaron el convenio en 2018, pero el Senado de México no dio su visto bueno hasta marzo.
La CFE tiene una planta nuclear que opera dos reactores. La secretaria de Energía del país, Rocío Nahle, ha calificado la energía nuclear como “limpia, segura, constante y rentable”.
El enviado climático de la Casa Blanca, John Kerry, viajó a México la semana pasada para hablar sobre energía renovable con el presidente Andrés Manuel López Obrador, centrándose en el litio, las baterías y la industria automotriz.
(Reporte de Brendan O’Boyle. Editado en español por Ana Isabel Martínez)