Las importaciones de gasolina de México se encuentran en su nivel más bajo desde que se inició el conteo por parte de la SENER.
La política energética de la actual administración, de poner trabas regulatorias a los importadores y comercializadores privados de combustibles en el país, comienza a dar resultados.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Energía (SENER), durante la segunda semana de octubre de este año, los niveles de importación de gasolina se ubicaron en su nivel más bajo desde que se inició el conteo en 2018.
Las importaciones de gasolina han comenzado una tendencia a la baja desde el mes de julio, cuando alcanzó un pico de 819 mil barriles diarios y posteriormente bajar hasta 175 mil barriles en la segunda semana de octubre.
A la primera semana de noviembre, la SENER reportó que se habían traído al país un total de 245 mil barriles, cuando el año pasado se importaron 795 mil barriles.
Históricamente, las importaciones de gasolina se mantenían estables con pequeñas fluctuaciones estacionales, manteniéndose en otros años en rangos de 500 a 600 mil barriles.
Mientras que los inventarios se encuentran en la última semana de noviembre, se encuentra en su nivel más alto de los últimos cinco años para esa semana, con un total de 7 millones de barriles, frente a los 271 mil barriles registrados hace un año, cifra anterior más alta para esa semana.
