Ataque prolonga parálisis de bombeo de crudo por oleoducto colombiano Caño Limón-Coveñas.
El oleoducto colombiano Caño Limón-Coveñas sufrió el martes un nuevo ataque con explosivos prolongando la suspensión del bombeo de crudo entre los campos de producción del noreste del país y un puerto del Caribe desde donde se exporta, informó Cenit, la filial de Ecopetrol dedicada al transporte de hidrocarburos.
El más reciente atentado se registró en zona rural del municipio de Saravena, en el departamento de Arauca, obligando a activar el plan de emergencia y contingencia, reportó la empresa.
“La compañía hace un llamado a la comunidad de este sector para que se abstenga de acercarse al sitio del incidente, hasta tanto culminen las labores de evaluación, reparación, limpieza y recolección a que haya a lugar”, dijo un comunicado.
“Cenit y Ecopetrol rechazan estas acciones ilícitas y hacen un llamado para que cesen estos delitos contra la infraestructura que ponen en riesgo la integridad de las personas, generan graves consecuencias al medio ambiente y afectan las actividades de las comunidades y de la industria petrolera”, agregó el comunicado.
Tropas del Ejército desarrollan operaciones de aseguramiento para facilitar el ingreso del personal encargado de la reparación.
El restablecimiento del bombeo dependerá de que las Fuerzas Militares aseguren la zona en donde se registró el atentado y se concluyan los arreglos, aseguró un portavoz de Cenit.
La filial de Ecopetrol no atribuyó el ataque a ninguna organización, pero según las Fuerzas Militares en la zona tienen presencia rebeldes del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y disidencias de las FARC que se apartaron de un acuerdo de paz firmado en 2016 para poner fin a un conflicto armado de más de medio siglo que ha dejado 450 mil muertos.
Durante 2022 el Oleoducto Caño Limón-Coveñas, de 773 kilómetros de longitud y con capacidad para transportar hasta 210 mil barriles diarios de crudo, fue blanco de 13 ataques, algunos de los cuales provocaron incendios y contaminación de ríos y quebradas, según estadísticas de Cenit.
Reuters. (Reporte de Luis Jaime Acosta)