Pemex informó que el derrame de petróleo en el Golfo de México fue provocado por chapopoteras.
El derrame de hidrocarburos denunciado por diversas asociaciones ambientalistas en la Sonda de Campeche se debió a dos factores, en primer lugar, a un fenómeno natural conocido como ‘chapopoteras’ y en segundo lugar, a una “pequeña fuga” en el campo Ek-Balam, aclaró en conferencia de prensa, Octavio Romero Oropeza, director general de Petróleos Mexicanos (Pemex).
Organizaciones medioambientales denunciarán un derrame de petróleo que se extendió 467 kilómetros en la Sonda de Campeche, que coincidió con el incendio de la plataforma petróleo Nohoch-A el pasado 7 de julio.
De acuerdo con Romero Oropeza, la fuga en un ducto en el campo Ek Balam duró 18 días, sin embargo, la mancha que se reportó en el mar no corresponde a este incidente, sino que se trata de un fenómeno natural conocido como chapopoteras.
“Hay una actividad constante de las chapopoteras de Cantarell, hay días que las emanaciones son muy grandes y otros en los que no es así y las iridiscencias pueden ir al norte, al noreste, al este, esto depende de las corrientes marinas, los vientos, de las mareas de fondo.
Las chapopoteras son fenómenos naturales que se formaron hace millones de años. La mayor de ellas se ubica en el campo Cantarell y se originan en una fractura de aproximadamente mil 500 metros de longitud, con diversos puntos de emisión de hidrocarburo a la superficie del mar.
El Consejo Nacional de Investigación de los Estados Unidos ha concluido que las ‘chapopoteras’ representan a nivel mundial el 46% anual de la aportación de hidrocarburos que se derraman en el ambiente oceánico.
“En una imagen satelital del 30 de junio, antes de la fuga en Ek Balam, ya se observan las emanaciones de las chapopoteras de Cantarell. El 24 de julio, después del incidente, todavía se ve una emanación menor en Balam. En promedio las chapopoteras de Cantarell emiten 385 barriles por día”, dijo Romero Oropeza.
Pemex informó que el derrame de petróleo en el Golfo de México fue provocado por chapopoteras.
El derrame de hidrocarburos denunciado por diversas asociaciones ambientalistas en la Sonda de Campeche se debió a dos factores, en primer lugar, a un fenómeno natural conocido como ‘chapopoteras’ y en segundo lugar, a una “pequeña fuga” en el campo Ek-Balam, aclaró en conferencia de prensa, Octavio Romero Oropeza, director general de Petróleos Mexicanos (Pemex).
Organizaciones medioambientales denunciarán un derrame de petróleo que se extendió 467 kilómetros en la Sonda de Campeche, que coincidió con el incendio de la plataforma petróleo Nohoch-A el pasado 7 de julio.
De acuerdo con Romero Oropeza, la fuga en un ducto en el campo Ek Balam duró 18 días, sin embargo, la mancha que se reportó en el mar no corresponde a este incidente, sino que se trata de un fenómeno natural conocido como chapopoteras.
“Hay una actividad constante de las chapopoteras de Cantarell, hay días que las emanaciones son muy grandes y otros en los que no es así y las iridiscencias pueden ir al norte, al noreste, al este, esto depende de las corrientes marinas, los vientos, de las mareas de fondo.
Las chapopoteras son fenómenos naturales que se formaron hace millones de años. La mayor de ellas se ubica en el campo Cantarell y se originan en una fractura de aproximadamente mil 500 metros de longitud, con diversos puntos de emisión de hidrocarburo a la superficie del mar.
El Consejo Nacional de Investigación de los Estados Unidos ha concluido que las ‘chapopoteras’ representan a nivel mundial el 46% anual de la aportación de hidrocarburos que se derraman en el ambiente oceánico.
“En una imagen satelital del 30 de junio, antes de la fuga en Ek Balam, ya se observan las emanaciones de las chapopoteras de Cantarell. El 24 de julio, después del incidente, todavía se ve una emanación menor en Balam. En promedio las chapopoteras de Cantarell emiten 385 barriles por día”, dijo Romero Oropeza.