Jair Bolsonaro expresó a la prensa su intención de privatizar a la petrolera estatal Petrobras.
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, dijo que tiene la intención de privatizar la petrolera estatal y la empresa más grande de es país, Petrobras.
“Yo ya tengo ganas de privatizar Petrobras, tengo ganas. Voy a ver con el equipo económico qué podemos hacer”, aseguró el mandatario en una entrevista con la radio evangélica Novas da Paz.
Actualmente, Bolsonaro enfrenta fuertes de la sociedad brasileña por el alza en los precios de los combustibles.
La declaración del presidente coincide con la del ministro de Economía, Paulo Guedes, quien afirmó que el Gobierno considera vender parte de su participación de control en la petrolera estatal para financiar programas sociales a familias en condiciones de vulnerabilidad.
Bolsonaro, se había mostrado en contra de la privatización de Petrobras, al considerarla “estratégica” para la nación sudamericana.
No obstante, ha visto su popularidad caer en picada en medio de los elevados costos de la energía eléctrica, gas y combustibles, que llevaron la inflación brasileña a alcanzar los dos dígitos en septiembre.
Pese a ello, el presidente defendió la “autonomía” de la petrolera, que es controlada por el Estado pero tiene acciones negociadas en las bolsas de Sao Paulo, Nueva York y Madrid, y dijo que no pretende “interferir” en la política de precios de la estatal.
“Petrobras tiene autonomía para ello, es una empresa de economía abierta, en la Bolsa de todo el mundo. Una interferencia aquí sería sentida allá”, añadió.
Jair Bolsonaro expresó a la prensa su intención de privatizar a la petrolera estatal Petrobras.
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, dijo que tiene la intención de privatizar la petrolera estatal y la empresa más grande de es país, Petrobras.
“Yo ya tengo ganas de privatizar Petrobras, tengo ganas. Voy a ver con el equipo económico qué podemos hacer”, aseguró el mandatario en una entrevista con la radio evangélica Novas da Paz.
Actualmente, Bolsonaro enfrenta fuertes de la sociedad brasileña por el alza en los precios de los combustibles.
La declaración del presidente coincide con la del ministro de Economía, Paulo Guedes, quien afirmó que el Gobierno considera vender parte de su participación de control en la petrolera estatal para financiar programas sociales a familias en condiciones de vulnerabilidad.
Bolsonaro, se había mostrado en contra de la privatización de Petrobras, al considerarla “estratégica” para la nación sudamericana.
No obstante, ha visto su popularidad caer en picada en medio de los elevados costos de la energía eléctrica, gas y combustibles, que llevaron la inflación brasileña a alcanzar los dos dígitos en septiembre.
Pese a ello, el presidente defendió la “autonomía” de la petrolera, que es controlada por el Estado pero tiene acciones negociadas en las bolsas de Sao Paulo, Nueva York y Madrid, y dijo que no pretende “interferir” en la política de precios de la estatal.
“Petrobras tiene autonomía para ello, es una empresa de economía abierta, en la Bolsa de todo el mundo. Una interferencia aquí sería sentida allá”, añadió.