Mezcla mexicana se vio afectada ligeramente por el aumento en los inventarios de gasolina en Estados Unidos.
La mezcla mexicana de petróleo registró una caída de 0.29% o 0.22 dólares frente al precio de cierre del miércoles, al cotizarse en el mercado energético internacional en 76.75 dólares por barril, informó Petróleos Mexicanos (Pemex).
La mezcla mexicana de petróleo mantiene un promedio de 74.05 dólares por barril, 9 dólares por arriba de lo presupuestado por la Secretaría de Hacienda para 2022.
En los últimos 17 días la mezcla mexicana ha ganado 21%, lo cual le permitió romper la barrera de los 75 dólares por barril, luego de caer de ese nivel a mediados de noviembre tras el surgimiento de la variante ómicron de COVID-19.
Por otra parte, el WTI cerró este jueves con un descenso del 0.6%, hasta 82.12 dólares, con la recuperación de la demanda en el punto de mira.
Mientras que el Brent para entrega en marzo acabó este jueves en el mercado de futuros de Londres en 84.67 dólares, una caída del 0.24% respecto al cierre de la sesión anterior.
Por otra parte, los contratos de gas natural para entrega en febrero restaron 59 centavos, hasta los 4.27 dólares por cada mil pies cúbicos.
Mientras que los contratos de gasolina con vencimiento el mismo mes bajaron 1 centavo hasta los 2.38 dólares el galón.
El petróleo retrocedió después de aumentar ayer hasta un máximo no visto en dos meses, arrastrado por el temor a una demanda más débil de la calculada.
Según los analistas, el mercado ha reaccionado a un aumento mayor de lo que se esperaba en las reservas de gasolina en Estados Unidos, lo que reflejó el efecto de la variante ómicron de la COVID-19.
“En Estados Unidos, las tasas de infección récord han forzado a muchos negocios y escuelas a cerrar mientras los trabajadores se recuperan del virus, lo que ha pesado sobre la demanda de gasolina y otros combustibles”, explicó Louise Dickson, de Rystad Energy.
Inicialmente, los inversores apostaron ayer por las compras debido al fuerte descenso en los inventarios de crudo, que se sitúan en su nivel más bajo desde octubre de 2018.
La Administración de Información Energética de Estados Unidos revisó esta semana al alza su previsión de demanda en el país hasta los 840 mil barriles diarios.
También influyó el testimonio del presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, ante el Senado, donde ayer dijo que la economía del país es fuerte y confió en que el impacto del repunte de COVID-19 será limitado.
Powell aseguró que su prioridad será luchar contra la inflación, que según datos conocidos hoy se situó en el 7% en tasa anualizada en diciembre, algo no visto en cuatro décadas.
“Este informe de inventarios de crudo y la lectura del IPC no cambian las expectativas de los inversores de energía de que el mercado siga ajustado en el corto plazo”, indicó el analista Ed Moya, de la firma Oanda.
Mezcla mexicana se vio afectada ligeramente por el aumento en los inventarios de gasolina en Estados Unidos.
La mezcla mexicana de petróleo registró una caída de 0.29% o 0.22 dólares frente al precio de cierre del miércoles, al cotizarse en el mercado energético internacional en 76.75 dólares por barril, informó Petróleos Mexicanos (Pemex).
La mezcla mexicana de petróleo mantiene un promedio de 74.05 dólares por barril, 9 dólares por arriba de lo presupuestado por la Secretaría de Hacienda para 2022.
En los últimos 17 días la mezcla mexicana ha ganado 21%, lo cual le permitió romper la barrera de los 75 dólares por barril, luego de caer de ese nivel a mediados de noviembre tras el surgimiento de la variante ómicron de COVID-19.
Por otra parte, el WTI cerró este jueves con un descenso del 0.6%, hasta 82.12 dólares, con la recuperación de la demanda en el punto de mira.
Mientras que el Brent para entrega en marzo acabó este jueves en el mercado de futuros de Londres en 84.67 dólares, una caída del 0.24% respecto al cierre de la sesión anterior.
Por otra parte, los contratos de gas natural para entrega en febrero restaron 59 centavos, hasta los 4.27 dólares por cada mil pies cúbicos.
Mientras que los contratos de gasolina con vencimiento el mismo mes bajaron 1 centavo hasta los 2.38 dólares el galón.
El petróleo retrocedió después de aumentar ayer hasta un máximo no visto en dos meses, arrastrado por el temor a una demanda más débil de la calculada.
Según los analistas, el mercado ha reaccionado a un aumento mayor de lo que se esperaba en las reservas de gasolina en Estados Unidos, lo que reflejó el efecto de la variante ómicron de la COVID-19.
“En Estados Unidos, las tasas de infección récord han forzado a muchos negocios y escuelas a cerrar mientras los trabajadores se recuperan del virus, lo que ha pesado sobre la demanda de gasolina y otros combustibles”, explicó Louise Dickson, de Rystad Energy.
Inicialmente, los inversores apostaron ayer por las compras debido al fuerte descenso en los inventarios de crudo, que se sitúan en su nivel más bajo desde octubre de 2018.
La Administración de Información Energética de Estados Unidos revisó esta semana al alza su previsión de demanda en el país hasta los 840 mil barriles diarios.
También influyó el testimonio del presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, ante el Senado, donde ayer dijo que la economía del país es fuerte y confió en que el impacto del repunte de COVID-19 será limitado.
Powell aseguró que su prioridad será luchar contra la inflación, que según datos conocidos hoy se situó en el 7% en tasa anualizada en diciembre, algo no visto en cuatro décadas.
“Este informe de inventarios de crudo y la lectura del IPC no cambian las expectativas de los inversores de energía de que el mercado siga ajustado en el corto plazo”, indicó el analista Ed Moya, de la firma Oanda.