Alemania tomó el control de una refinería de propiedad de Rosneft en plena crisis energética.
Alemania puso el viernes a la filial alemana del gigante petrolero ruso Rosneft bajo la tutela del regulador federal, una fuente clave de combustible para Berlín.
De este modo, el Estado alemán se hace con el control directo de la refinería PCK en Schwedt.
La refinería, hasta ahora propiedad mayoritaria de Rosneft, ha puesto a prueba la determinación de Alemania de eliminar las importaciones de petróleo de Rusia para finales de año, en virtud de las sanciones europeas para castigar a Moscú por su invasión de Ucrania
“Con la administración (de la filial) se contrarresta la amenaza a la seguridad del suministro energético y se pone una piedra fundamental para la preservación y el futuro del emplazamiento de Schwedt”, dijo el Ministerio de Economía en un comunicado.
Rosneft Deutschland, que representa alrededor del 12% de la capacidad alemana de procesamiento de petróleo, pasará a estar bajo la tutela del regulador de la Agencia Federal de Redes, que dijo que el propietario original ya no tenía autoridad para dar instrucciones.
La toma de control de Rosneft Deutschland supone un nuevo paso de Alemania para apuntalar su industria energética, que está sufriendo los efectos de la guerra en Ucrania.
Alemania dijo esta semana que aumentaría los préstamos a las empresas energéticas que corren el riesgo de verse arruinadas por la subida de los precios del gas después que Rusia cortara el suministro a Europa en represalia por las sanciones occidentales.
La energética alemana Uniper dijo el miércoles que el Estado podría tomar una participación mayoritaria, alegando
que un anterior paquete de rescate estatal por valor de 19 mil millones de euros ya no era suficiente.
El Gobierno también ha puesto a SEFE, antes conocida como Gazprom Germania, bajo tutela después que el gigante energético ruso Gazprom se deshiciera de ella en abril.
Fuentes del Gobierno alemán habían dicho antes del anuncio del viernes que podría interrumpirse todo el suministro de
petróleo ruso.
La refinería de Schwedt, la cuarta más grande de Alemania y proveedora del 90% del combustible de Berlín, recibe todo el
crudo de Rusia a través del oleoducto Druzhba desde que se construyó en la década de 1960. Partes del oeste de Polonia también se abastecen a través de Schwedt.
La medida del viernes va acompañada de un “paquete integral” destinado a garantizar el suministro de petróleo a Schwedt a través de rutas alternativas, según el Ministerio.
Con el cambio en la administración, la Agencia Federal de Redes también se hace cargo de las acciones de Rosneft
Deutschland en las refinerías MiRo y Bayernoil, en Karlsruhe y Vohburg respectivamente.
No está claro quién podría sustituir a Rosneft como operador de la refinería de Schwedt. Shell, que posee una participación del 37,5% en Schwedt, lleva tiempo queriendo retirarse.
Verbio y Enertrag, ambas dedicadas a las energías renovables, han manifestado su interés.
El canciller, Olaf Scholz, el ministro de Economía, Robert Habeck, y el primer ministro del estado de Brandeburgo
desvelarán los detalles del paquete a las 13:30 hora local, añadió el ministerio.
(Reportaje de Paul Carrel; edición de Clarence Fernández y Kenneth Maxwell; traducido por Tomás Cobos)
Alemania tomó el control de una refinería de propiedad de Rosneft en plena crisis energética.
Alemania puso el viernes a la filial alemana del gigante petrolero ruso Rosneft bajo la tutela del regulador federal, una fuente clave de combustible para Berlín.
De este modo, el Estado alemán se hace con el control directo de la refinería PCK en Schwedt.
La refinería, hasta ahora propiedad mayoritaria de Rosneft, ha puesto a prueba la determinación de Alemania de eliminar las importaciones de petróleo de Rusia para finales de año, en virtud de las sanciones europeas para castigar a Moscú por su invasión de Ucrania
“Con la administración (de la filial) se contrarresta la amenaza a la seguridad del suministro energético y se pone una piedra fundamental para la preservación y el futuro del emplazamiento de Schwedt”, dijo el Ministerio de Economía en un comunicado.
Rosneft Deutschland, que representa alrededor del 12% de la capacidad alemana de procesamiento de petróleo, pasará a estar bajo la tutela del regulador de la Agencia Federal de Redes, que dijo que el propietario original ya no tenía autoridad para dar instrucciones.
La toma de control de Rosneft Deutschland supone un nuevo paso de Alemania para apuntalar su industria energética, que está sufriendo los efectos de la guerra en Ucrania.
Alemania dijo esta semana que aumentaría los préstamos a las empresas energéticas que corren el riesgo de verse arruinadas por la subida de los precios del gas después que Rusia cortara el suministro a Europa en represalia por las sanciones occidentales.
La energética alemana Uniper dijo el miércoles que el Estado podría tomar una participación mayoritaria, alegando
que un anterior paquete de rescate estatal por valor de 19 mil millones de euros ya no era suficiente.
El Gobierno también ha puesto a SEFE, antes conocida como Gazprom Germania, bajo tutela después que el gigante energético ruso Gazprom se deshiciera de ella en abril.
Fuentes del Gobierno alemán habían dicho antes del anuncio del viernes que podría interrumpirse todo el suministro de
petróleo ruso.
La refinería de Schwedt, la cuarta más grande de Alemania y proveedora del 90% del combustible de Berlín, recibe todo el
crudo de Rusia a través del oleoducto Druzhba desde que se construyó en la década de 1960. Partes del oeste de Polonia también se abastecen a través de Schwedt.
La medida del viernes va acompañada de un “paquete integral” destinado a garantizar el suministro de petróleo a Schwedt a través de rutas alternativas, según el Ministerio.
Con el cambio en la administración, la Agencia Federal de Redes también se hace cargo de las acciones de Rosneft
Deutschland en las refinerías MiRo y Bayernoil, en Karlsruhe y Vohburg respectivamente.
No está claro quién podría sustituir a Rosneft como operador de la refinería de Schwedt. Shell, que posee una participación del 37,5% en Schwedt, lleva tiempo queriendo retirarse.
Verbio y Enertrag, ambas dedicadas a las energías renovables, han manifestado su interés.
El canciller, Olaf Scholz, el ministro de Economía, Robert Habeck, y el primer ministro del estado de Brandeburgo
desvelarán los detalles del paquete a las 13:30 hora local, añadió el ministerio.
(Reportaje de Paul Carrel; edición de Clarence Fernández y Kenneth Maxwell; traducido por Tomás Cobos)